El amor que yo soñé

dieciocho

Cedric y Neville se pararon fuera de la reja de la mansión, de repente apareció un pequeño elfo de ojos saltones haciendo su tan exagerada reverencia
-dobby quiere saber que es lo que desean-

-necesito hablar con el joven malfoy- informo Cedric, estaba muy nervioso, estaba cerca de volver a ver al amor de su vida

-el señorito malfoy y toda su familia se encuentran de viaje junto con el prometido del señorito- les informo
A Cedric se le hizo un nudo en el estómago al enterarse del compromiso de Draco -y sabe dónde se encuentran?- preguntó

-dobby solo sabe que el prometido del señorito malfoy los invito de viaje a Estados Unidos y no van a regresar en mucho tiempo - Cedric se volteo y pateó una piedra desesperado, no quería ni imaginar lo que ese tipo le podría hacer a Draco.
-y no sabes en qué parte de Estados Unidos se encuentra?- volvió a insistir
-dobby no lo sabe, lo siento- y desapareció de ahí
-no puedo creerlo, Estados Unidos es muy grande y no tengo forma de llegar ahi neville no se que voy a hacer- se dejó caer de rodillas
-Tranquilo, no queda más que esperar a que vuelva, estaremos dando vueltas para ver si ya regreso- y se fueron de ahí con el corazón roto.

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Una vez que llegaron a Estados Unidos la doctora Hermione Granger les explico la condición en la que se encontraba la salud de Narcisa, el tratamiento que recibiría y que por lo pronto debería de estar hospitalizada al menos un par de semanas.

Por su parte Harry consiguió un hermoso departamento cerca de central park en Nueva York en una pequeña comunidad mágica que convivía en armonía con los muggles ya que ahí se encontraba el hospital donde trabajaba la doctora Granger.

Los días fueron pasando y Narcisa mejoraba considerablemente, pronto dejo el hospital y se instalo también en el piso que Harry estaba rentando ya que aún seguía bajo observación y tratamiento, cada vez que tenían oportunidad veían los detalles de la boda, Harry le compro a Draco un traje bellísimo y una túnica espectacular y que aunque Harry aún no lo veía con ella sabía que sería el novio más guapo del mundo.

Draco no cambio su forma fría de tratar a Harry, aunque estaba agradecido con él por qué su madre estaba mejor.
Así que el día en que le dieron el alta a Narcisa había llegado, faltaba solo un día para la boda así que partieron esa mañana hacia Londres.

Una vez que llegaron a la mansión Narcisa subió a su recamara, el viaje la había agotado un poco y quería estar mejor para la boda de su hijo.
-gracias por todo lo que hiciste por mi madre, estoy en deuda contigo- le dijo Draco a Harry
-no tienes nada que agradecer, eh llegado a estimar mucho a tu madre, es una excelente persona- tomo entre sus manos la delicada mano del rubio dónde brillaba su anillo de compromiso y la besó -te veo mañana en el altar- y con eso le dió un tierno beso en sus carnosos labios.
Harry se fue a su casa, quería descansar un poco y finalizar la sorpresa que le tenía a Draco para su luna de miel.

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Ron estaba en la hacienda, después de que Harry se hubiera ido de viaje con la familia malfoy, decidio que era buena idea ir a visitar a su familia, extrañaba mucho a su madre y la vida en el campo.
Ginny se puso como loca cuando se enteró que Harry no iba con el, estaba perdiendo el tiempo, si no aparecía pronto no lo podría conquistar.
Ron nunca le contó a su familia sobre los planes de boda de Harry, todavía tenía la esperanza de que no se llevará a cabo, porque la familia Malfoy solo lo estaba usando para un beneficio propio dándole a su hijo a cambio , estaba tan metido en sus pensamientos que se asusto cuando una lechuza apareció frente a el, le retiro la carta de la pata le dió una golosina y la lechuza se fue.