Mientras tanto en el campamento corazón, por alguna razón el entrenamiento se sentía menos extenuante cómo normalmente es. Ya eran más de las 2:00 pm, los chicos se encontraban practicando el tiro con arco.
Gordi ponía todo su empeño, siguió el consejo de Coco y trató de no pensar en su hermano (sólo por hoy). Practicaba los tiros y aunque no le daba al blanco, el hecho de acertar en el tablero en lugar de el suelo, ya era un logro muy grande para él. Tanto Achuchones cómo Coco lo reconocieron.
– Caramba... Yo creo que sí continuas así serás uno de los mejores. Obvio sin superarme a mi jaja. – exclamó Coco, bastante orgulloso del osito rosa.
– ¿De verdad lo crees?– preguntaba nerviosamente Gordi, con una sonrisa tierna y unos ojos esperanzados.
– Tss simón mi gordis, ¡Apostaría mi pierna izquierda a que si! – Achuchones le contestó en un tono ameno de orgullo.
De verdad que para Gordi este era el mejor día de su vida, en un día sereno dónde no recibió ningún insulto, burla, al contrario, se sentía agusto con su compañía, el ejercicio no lo sentía tan pesado y agradecía infinitamente que Coco y Achuchones estuvieran a su lado en ese día y los anteriores.
La tranquilidad se vió interrumpida cuando un osito color lila de ojos verdes con uniforme de mensajero llegó con el Sargento Caricias.
– ¡Sargento! Vengo a entregaros estás dos cartas, directamente de los altos mandos. – exclamó en voz alta aquel oso.
– Muy bien, gracias.– dijo el Sargento Caricias, abrió primero una de las cartas. – ¡A ver, reclutas! ¡Escuchen con atención! – se aclaró la garganta antes de leer la primera misiva. – ¡A vuestros oídos llega esta carta, reflexionamos sobre el caso de Achuchones y su "ataque", hemos decidido rechazar la petición de castigo ya que no hay pruebas suficientes, además olvidar el caso definitivamente. Atte: los altos mandos. "Honor, dolor y mimos."!–
Y después de eso, el Sargento pensó confundido sobre ello, se quedó en silencio.– Wow, no me acordaba de eso jeje...– dijo Achuchones, nervioso.
– En realidad todos nos olvidamos de eso, y ahora archivaron el caso, es cómo si a los altos mandos no les importará el Cabo Pompón. Y más extraño todavía el hecho de que no fuera el Cabo él que denunció. – monologaba el osito amarillo-brillante.
– No creó que haya sido por eso...– susurró Gordi, avergonzado internamente.
Y nuevamente, la voz del Sargento volvió a escucharse.
– ¡Ahora la siguente! Dice: "El comandante Fluffy; cómo todos los meses, hará registro de listas en reclutas y soldados, hoy a las 4:00 PM" – una vez terminado el Sargento solamente indicó a los reclutas continuar con la rutina.
Por su parte, el mensajero comprobando que efectivamente las misivas importantes ya se habían anunciado, se retiró satisfecho.
– Espera... Hace un mes eso lo hacía el Cabo Pompón, ¿Por qué ahora lo hace el Comandante? – preguntó Pandi confundido.
– Si, pero creo él y el Cabo tuvieron una disputa bastante violenta. – le susurró Sonrisas.
– Oh... pero si hay listado y Azulín no aparece, nos meterán al bote a todos. – habló seguidamente Coco.
– Pero no tenemos tiempo, nos quedan menos de 2 horas. – dijo Mime.
Casi inmediatamente, le contestó Memi. – Ahora sólo nos queda esperar un milagro... Ó fingir que nunca existió. –
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Prueba de amor. (Cabo Pompón🧡 x Azulín💙)
FanfictionLa locura es algo difícil de describir, sobretodo cuando la mente de uno está plagada de traumas, desgracias, desconciertos y recuerdos desgarradores. Azulín quiere poner a prueba a Pompón, sacando una idea tan desquiciada de su mente podrida. Sin...