LEONOR.
Ya no me sorprende despertar en esta sala, ni me sorprende levantarme adolorida puedo decir que ya me acostumbré a esto; mire de un lado a otro acostumbrándome a la fuerte luz que cae sobre mi rostro, no puedo mover mis brazos ni mis piernas, siento mi rostro muy caliente y algunas partes de mi cuerpo aún arden. Suspiré al recordar lo que había pasado, aveces hago cosas muy imprudentes por personas que seguramente no las harían por mi.
Busque con la mirada a Rachel, me alegré al no verla en el cuarto de al lado, esta vez nadie murió en mi presencia; el chico que nos transportó murió pero por lo menos no estuve junto a él, me cacheteé mentalmente por pensar esa gran tontería una vida dejo este mundo y no sabemos cuál fue la razón de su muerte.
-¿Estás aburrida? -Escuché una voz un poco lejana, busque con la mirada y vi a Marcus detrás del cristal, asentí -Bueno llevas ahí más de treinta horas -Rio un poco, pero se ve extrañamente mal.
-¿Te lastimaste o por qué te ves así? -Pregunté en voz baja y rasposa.
-Mi corazón es el que está lastimado -Me sorprendí, el gran muchacho que se parece a Hulk y que tiene una gran personalidad de mierda si tiene corazón; él pareció notar mi sorpresa, lo escuché reír -Hasta los robles más duros tenemos nuestro lado blando.
Silencio, ambos parecemos estar perdidos en nuestras propias lagunas mentales, mire a Marcus con atención reparando en cada detalle de él; es muy atractivo solo que su personalidad le resta cien mil puntos a su belleza, pero cualquier persona que lo vea de lejos puede llegar a tener un Crush con él, lástima que la primera vez que yo lo vi no fue en las mejores circunstancias.
-¿Te gustó o por qué me miras tanto? -Reí y dolió, apreté mis ojos al sentir un fuerte ardor en mis pulmones -No te sobreesfuerces muñeca de porcelana.
-No te burles de mi -Mi voz sonó mal, muy rasposa y seca -¿Cómo me veo? -Pregunté curiosa de mi apariencia.
-Como la mierda -Recostó su cabeza sobre la pared -Pero cuando recién llegaste estabas peor, ronchas gigantes aquí y allá, las manos milagrosas de Mili te han hecho mejorar muy rápido -Algo cambio en su rostro cuando menciono al doctor.
-¿Por qué estás aquí, Marcus? -No esta dentro de ninguna cámara de descontaminación, solo está sentado ahí fuera como un tonto.
-No se -Pareció pensar algo antes de continuar -Quizas empezaste a agradarme y quiero cuidarte -Reí, es un chico muy bromista -Solo sentí la necesidad de estar aquí -Levanto sus hombros.
Volvimos a quedar en silencio acompañados por los pitidos de las máquinas a nuestro alrededor, quizás Marcus no sea un mal tipo después de todo, aún así no voy a confiar en él aún.
-Oye Nor -Él aún sigue mirando a un lado suyo con su cabeza apoyada en la pared, parece no querer hacer contacto visual -¿Alguna vez amaste tanto a alguien qué eras capaz de dejar de lado lo malo que hizo? -Paso su lengua sobre sus labios -Quizás un familiar o no se.
Lo pensé, ¿amar a alguien tanto como para darle la espalda a mi moral?, Sonreí con melancolía, nunca pude darme ese lujo.
-No -Conteste en un simple susurro -Nunca pude amar a alguien, mi vida siempre ha sido complicada -No quiero dar más información acerca de lo oscura que fue mi adolescencia e infancia -¿Por qué lo preguntas? -Sentí la necesidad de hacer la pregunta, la curiosidad pica en mi.
Suspiró y cerró sus ojos, se ve emocionalmente apagado y agotado como si tuviera una gran carga sobre sus hombros.
-Hay alguien a quien he amado desde hace muchos años -Observo las palmas de sus manos -Pero hizo algo que me decepcionó -Sonrío con ironía -No soy quien para hablar de moral, no soy la persona indicada para eso, he sido el ser más inmoral de esta tierra solo que -Hizo una pausa, algo pareció quebrarse en sus ojos marrones -Él siempre fue alguien tan puro que no puedo imaginarlo haciendo algo cómo eso -Paso sus manos sobre su rostro, se ve frustrado.
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Exterminio [Saga NK64]
Science FictionLa soledad que en la ciudad habitaba no se comparaba con la soledad de mi alma, caminar por las calles y no ver a nadie no era tan doloroso como saber que en algún momento yo moriría y nadie lo sabría, nadie lloraría por la falta de mi presencia en...