Десять¹⁰

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Esta mañana que desperté y empecé mis labores me di cuenta que Ezra tiene un grupo de fans, pobres personas con pesimos gustos, físicamente no es muy atractivo y su personalidad es una porquería, no entiendo que le ven, ni modo de decir que pueden ser sus dotes de líder, porque a mí parecer lidera mejor un chihuahua que él.

Aveces creo que lo odio, pero no, realmente no lo hago solo... Me exaspera su existencia y el pobre hombre no me ha hecho nada malo, o bueno eso creo; creo que es su manera de ser y actuar lo que me hace tener este resentimiento hacia él, o quizás sean celos.

Una de las chicas del comedor me invitó a una especie de reunión que hacen los más jóvenes del lugar, me pareció un acto muy bonito y apesar de que en un inicio quise negarme y simplemente pasar la noche en mi cuarto encerrada, acepté solo por no ser descortés y también porque quiero darle algo de movimiento a mi vida.

Durante el resto del día me sentí ansiosa, es la primera vez después de muchos años que voy a socializar con personas de mi edad y no sé cómo lo hacen en este lugar, no sé si se comportan como raritos o son como en el exterior. O sea, raritos.

-Ey Nor, a las 8:40 pasamos por ti a tu habitación -Dijo Noah uno de los chicos del grupo; es un tipo muy común, cabello castaño, ojos cafés, labios delgados y estatura promedio, pero parece tener una personalidad bastante llamativa.

-Ésta bien -Le contesté antes de retomar mis labores.

Estuve lavando platos y ollas hasta que finalice mi turno, me pareció buen momento para dar un pequeño recorrido al lugar, quizás aprovechar para aprenderme los caminos y dejar de perderme cada mañana.

Saliendo de la cocina hay cinco pasillos, uno de ellos lleva a la zona común, el otro va directo a los dormitorios donde por cierto aún no me han dado un espacio, pasando al tercero ese lleva directo a las oficinas importantes un lugar prohibido para los que no aportamos algo de valor a los campos que componen las oficinas; ahora vamos al cuarto pasillo, este nos lleva directo a un laberinto con más pasillos, sin embargo logró identificar que este cuarto pasillo me puede llevar a la enfermería general y a la zona donde está mi cuarto; y ya por último tenemos el quinto pasillo, un lugar prohibido del que no tengo ningún tipo de información más allá de que el acceso es completamente restringido para casi todas las personas del búnker.

Suspirando con indecisión decidí hacer un tinmarin y que el destino me guíe a donde deba de ir.

-No -Dije sin pensar, creo que la suerte no está mucho de mi lado hoy... Ni hoy ni nunca.

Golpeteando mi dedo en mi muslo me mantuve parada frente a ese pasillo dudando en si debo de adentrarme a él y ganarme un buen regaño, avance un paso y luego retrocedí dos, ya se que soy una persona bastante aventurera y que me gusta la adrenalina, pero este pasillo me causa una muy mala sensación y tengo un mal presentimiento.

-Bueno, no creo que vaya a morir por entrar ahí -Susurré a la nada dándome ánimos para romper las reglas.

Decidí no pensarlo más, me adentre en el pasillo y caminé sin mirar atrás por un muy buen rato, camine derecho y no hay ningún otro pasillo todo el camino es recto y si miro fijamente al frente aún no se ve el final de este lugar.

Ahora sí estoy empezando a creer que fue una muy mala idea haber dejado que mis pensamientos intrusivos me ganarán y me hicieran venir aquí, volteé con la intención de devolverme pero se veía más lejos la entrada que la salida, es más ni siquiera se veía la entrada solo alcanzaba a visualizar un pequeño punto de un color distinto a este pasillo puramente blanco.

Seguí mi camino, ya que ya había iniciado esta aventura ahora voy a llegar hasta el final, solo los cobardes dejan una aventura a medias y yo no soy uno de ellos.

Exterminio [Saga NK64]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora