One Shots ★ JᴇᴏɴɢMɪ ©

Entre miradas.

Yoo y Myoui fueron dos almas que se encontraron por casualidad en un café acogedor. Vivían vidas sencillas y ordinarias, pero desde el momento en que sus ojos se cruzaron, algo mágico sucedió.

Mina era una joven artista con una pasión desbordante por la pintura, sus lienzos eran un reflejo de su corazón, llenos de colores vibrantes y emociones intensas. Mientras tanto, Jeongyeon era una amante de la música, una talentosa pianista que podía transmitir sentimientos profundos a través de las teclas.

En aquel café, Mina estaba sumergida en sus pensamientos mientras disfrutaba de un café caliente. Sus ojos se encontraron con los de Jeongyeon, quien estaba sentada al piano en una esquina. Sus dedos danzaban sobre las teclas, y su música parecía envolver todo el lugar.

Sin decir una palabra, ambas se sentían atraídas por la energía que emanaban, era como si el universo hubiera conspirado para unir sus corazones en aquel momento. Mina se acercó tímidamente al piano y Jeongyeon dejó de tocar, cautivada por su belleza.

Con el corazón latiendo con fuerza, Mina extendió su mano hacia la pelicorto y le dijo:

─ Su música me ha tocado el alma. ¿Me acompañaría a un paseo por el jardín? ─ y regalo una ligera sonrisa al terminar

La joven Yoo, sin poder articular palabras, asintió con la cabeza y tomó su mano suavemente.

Mientras caminaban entre las flores en plena primavera, el silencio entre ellas era cómodo y lleno de significado. Sus miradas decían más que mil palabras. Mina sintió una conexión profunda con Jeongyeon, como si hubiera conocido su alma desde siempre.

─ Y dígame, ¿Siempre a dedicado su tiempo al piano? ─

─ Exactamente, la música es parte de mí ─ contestó a su pregunta. ─ Y usted, ¿a que suele dedicar su tiempo? ─

─ A la pintura, me encanta reflejarme a través de los lienzos y colores. Pero podrías hablarme de "tú", parece que somos casi de la misma edad ─

─ Fuiste tú, quien comenzó a llamarme formalmente ─ rieron ante la situación. ─ Y tengo 29 años, pareces tener 22 ─

─ Casi, pero no, tengo 27 años ─ volvieron a reír.

─ ¿Casi? Te quité 5 años. En serio pensé que tenías 22 ─

─ ¿Tan joven me veo? ─

─ Su... Digo, tú belleza es realmente de otro mundo. Es casi o bien dicho, irreal, me impresionó en cuanto nuestras miradas conectaron ─

Aquello hizo sonrojar a la joven pintora.

(✧✧✧)

A medida que los días pasaban, ambas jóvenes se encontraban cada vez más a menudo, tanto que sus encuentros se convirtieron en conversaciones profundas y risas compartidas. Descubrieron que tenían sueños similares y un amor mutuo por el arte y la belleza del mundo.

Mina comenzó a pintar retratos de Jeongyeon, capturando su esencia en cada pincelada. Mientras tanto, Jeongyeon componía melodías suaves y emotivas para ella. Juntas, crearon un universo propio, donde el arte y el amor se entrelazaban en una sinfonía de emociones.

Pero como en toda historia de amor, también hubo desafíos. La distancia amenazaba con separarlas, ya que la japonesa había planeado un viaje para expandir su carrera artística. Temerosas de perder lo que habían encontrado la una en la otra, decidieron enfrentar el desafío juntas.

...

Jeongyeon se encontraba en el aeropuerto, con su corazón latiendo con fuerza mientras se despedía de Mina.

─ Será temporal, así que no llores. Volveremos a reencontrarnos ─ sostenía sus manos temblorosas, mientras ella luchaba contra las lágrimas que amenazaban con desbordarse.

Sabía que esta despedida era solo temporal, que su amada regresaría a sus brazos, pero eso no hacía más fácil el dolor que sentía en ese momento.

─ Buen viaje Minari ─ Jeongyeon tomó su rostro y dejó un cálido beso en su frente.

Los minutos parecían eternos mientras la pelicorto observaba cómo ella se alejaba.

Pronto Mina partió en su viaje, llevando consigo los cuadros que había pintado de Yoo. Misma que observaba el avión despejando y su amada se convertía en un punto diminuto en el horizonte.

Sabía que este viaje era importante para su amada, un paso en su camino hacia el crecimiento personal y profesional. Aunque el dolor de la separación era difícil de soportar, Jeongyeon encontró consuelo en el amor profundo que compartían, se prometieron mutuamente esperarse y luchar por su relación, sabiendo que el día en que se reunieran nuevamente, sería un encuentro lleno de alegría y amor.

Con el corazón apretado pero lleno de amor, Jeongyeon se volvió y caminó lentamente fuera del aeropuerto, con la esperanza de que cada día que pasara las acercara más a ese anhelado reencuentro.

Durante los próximos meses, Jeongyeon trabajó en una nueva composición, inspirada en su amor por ella. A través de cartas y llamadas telefónicas, se mantuvieron cerca a pesar de la distancia física.

Finalmente, llegó el día en que la japonesa regresó a la ciudad. Jeongyeon esperaba impaciente en el café, y cuando sus ojos se encontraron una vez más, supieron que su amor había resistido la prueba del tiempo y la distancia.

─ Te extrañe ─ fue Yoo quien habló primero.

Para que después, sus corazones se fundieran en un abrazo cálido y apasionado.

─ Yo igual. Más de lo que puedas imaginar ─ dijo con lágrimas en sus ojos.

─ Oh cariño~ No hay porque llorar ─ dice mientras que, con la yema de sus dedos limpia las lágrimas. ─ Te amo ─ susurró para la joven japonesa.

─ Te amo Yoo ─ y dio un beso en los labios de su amada.

La joven Myoui presentó su última pintura, un retrato de ambas bajo un árbol floreciente y, la joven Yoo le dedicó su nueva composición, tocándola en el piano del café mientras el público observaba con admiración. Aquel día, el amor entre ellas se hizo eterno, inmortalizado en el lienzo y en la melodía.

Desde entonces, Mina y Jeongyeon siguieron creando arte juntas, alimentando su amor y su pasión por la vida.

Siempre recordaron aquel primer encuentro "entre miradas" en aquel café acogedor, donde dos almas se encontraron y se enamoraron para siempre.

Fin.
＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿＿

Mucho textooo. Chaooo.