𝕰𝖑 𝕮𝖔𝖓𝖙𝖗𝖆𝖙𝖔 | 𝕵𝖊𝖓𝖑𝖎𝖘𝖆

5

Un par de días pasaron en los que Jennie no supo nada de Lisa, simplemente le había enviado el dinero en efectivo, pero está vez sin ninguna tarjeta. Le pareció extraño, probablemente había salido de viaje o finalmente había entrado en razón y había puesto fin al contrato.

Jennie no se preocupó, simplemente continúo su vida y está vez se prometió en cuidar mejor su dinero. Era prácticamente millonaria, pero conociéndose era probable que en un día gastará todo el dinero. Además, estaba guardando una parte para comprarle algo a su madre y otra parte para su negocio.

Se puso a pensar en los negocios que podía tener, pero ninguna idea brotó. Entonces entendió la magnitud de su poder, no necesitaba matarse buscando una idea, podía financiar la idea de alguien más.

Fue sacada de sus pensamientos cuando el timbre sonó, extrañada por ello se acercó a abrir y descubrió de quién se trataba. Era Lisa, llevaba un traje negro similar al que solía usar en la sala del club.

— Hola, no te esperaba aquí — Jennie habló un poco extrañada.

— Lo sé, pero me salió un compromiso de último minuto y tengo que volar a Estados Unidos. El caso es que, me gustaría tener alguien a quien "abrazar" por las noches cuando esté allá — hizo enfasis en las comillas.

— ¿Hablas enserio? No puedes llegar así nadamás y exigirme que te acompañe a no sé dónde — Jennie se cruzó de brazos.

— En realidad, te estaba invitando. Sé que es repentino, pero quizás sea divertido ir a otro país, otro continente, otra ciudad, nosotras dos solas —

— ¿Puedo saber el motivo del viaje? Es lo mínimo que merezco —

— Tengo que ir a aprobar ciertos negocio, quizás no lo haz notado. Pero soy una mujer que debe su gran fortuna a las buenas inversiones que ha hecho — una idea entro a la cabeza de Jennie y dejo de escuchar a Lisa, podría encontrar un negocio en el que invertir allá.

— Está bien iré ¿Cuando partimos? — la interrupción lejos de molestar a Lisa, me causó gracia.

— Vaya pensé que sería necesario persuadirte más. Salimos en unas horas, así que es mejor que nos vayamos ya — Lisa toma la mano de Jennie.

— Aguarda, no he empacado nada y ¿Que hay de mi dinero? ¿Cómo haces un viaje sin planear? — Lisa sonrió.

— Por supuesto que ya está planeado, no necesitas ropa la comprarás allá. Y tu dinero puede estar a salvó en una caja fuerte que están subiendo ahora — Jennie observó a un par de hombres que cargaban una caja fuerte, Lisa las apartó para darles pasó a los hombres.

— Yo me encargo de todo, sólo camina. No podemos perder más tiempo, el vuelo se irá pronto — Jennie simplemente camino viendo hacia atrás.

[...]

Habían llegado a una pista de aterrizaje, Lisa estaba hablando con unas personas y después volvió con Jennie solamente para decirle que subiera a lo que parecía ser un jet. Lisa se burló diciéndole que el jet era suyo, pero no quería perder más tiempo.

— Espero estés cómoda, tardaremos un buen rato en llegar y haremos unas paradas. Pero te prometo llevarte a comprar ropa y lo que necesites cuando aterricemos, por lo pronto que te parece si aprovechamos para...— Lisa jugaba con sus manos, recorriendo la pierna de Jennie hasta que está la apartó.

— Alto ahí, no vamos hacer nada aquí — Jennie se cruzó de brazos.

— Oh por favor, es toda una fantasía hacerlo aquí — Lisa se acercó a su oreja y dió una pequeña mordida — Vamos te prometo hacerte sentir tan bien como en la oficina — Jennie rodó los ojos.

[...]

El baño era algo estrecho, sin embargo, eso no fue una limitante para Lisa que tenía su cara hundida en el trasero de Jennie. Apenas y podía mantenerse de pie, ahogaba sus gemidos mordiendo sus labios o su dedo.

Sentir la lengua de Lisa entrando y saliendo, moviéndose en círculos, tocando con el cuerpo o con la punta. Solamente se despegaba cuando necesitaba aire, pero inmediatamente lo recuperaba, volvía a hundirse.

— Tú no sabes lo loca que estoy por tu trasero — habló desde abajo.

— ¡Cállate! No digas esas cosas, solo continúa — Jennie había adquirido un rubor en sus mejillas por lo posición en la que estaba y las palabras de Lisa.

[...]

— Parece que ya hemos aterrizado en la primer parada, en Estambul — Lisa había despertado despeinada, después se aventurilla, habían acabado agotadas y decidieron dormir acurrucadas, bueno Lisa se acurruco en Jennie.

— ¿Turquía? Es extraño, jamás había imaginado que nos detendríamos aquí —

— Vamos, hay que estirar las piernas — Lisa río volviendo a pensar sus palabras — Bueno, caminar —

— ¿A dónde iremos? —

— Hice una reserva en un hotel, un vehículo pasará por nosotros. Después podemos ir a comprarte ropa en algún centro comercial de aquí — ambas caminaron y lograron divisar una camioneta obscura — Ese es nuestro transporte —

Lisa era extraña a los ojos de Jennie, a veces era una mujer con un insaciable deseo sexual y a veces era una mujer muy tierna e infantil. Eran dos personas diferentes en una, pero Jennie comenzaba acostumbrarse a ello, al menos a la primera.

Después haber llegado al hotel, descansado un momento y darse una ducha invidual, debido a que Jennie no permitió que Lisa entrará, impartieron camino al centro comercial más cercano. Jennie se sorprendió cuando Lisa sacó una tarjeta negra y se la entregó a Jennie.

— Compra lo que quieras, sólo intenta no volverte loca — Jennie sin pensarlo dos veces tomó a Lisa de la mano y la llevo a cada tienda que le llamó la atención.

Lisa observó diferentes conjuntos y prendas que Jennie se probaba, a veces daba su opinión y otras veces solo observaba con una sonrisa. Para Lisa ésto representaba un avance con Jennie, el permitirle acompañarla a algo tan común como ir a comprar ropa significa mucho para Lisa.

Se toparon con una tienda de lencería a la que Lisa arrastró a Jennie y le pidió su opinión acerca de algunos conjuntos, algunos fueron para ella otros para Jennie pese a su negación. Compraron distinta comida de puestos callejeros, algo que le hacía bastante ilusión a Jennie.

Finalmente volvieron al hotel donde Jennie le permitió a Lisa dormir con ella con la condición de que no se pasará de lista o de lo contrario terminaría durmiendo en el suelo.