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Jennie arrastraba a Lisa de la pierna tirandola de la cama, quien se aferraba a lo que tuviera cerca con tal de no ser arrastrada hasta el plan que había hecho ésta con su madrastra.

- ¡Vamos Lisa! Hice este plan para que pudiéramos convivir más - soltó a Lisa - No puedo creer que este hablando con una niña pequeña - se cruzó de brazos.

- Ya te dije que no quiero ir, odio ir a ese tipo de actividades. Siempre son aburridas y requieren que socialice con los demás - Lisa hundió su cabeza en el suelo.

- Precisamente esa fue la razón por la que organice ésto. Tú me arrastraste hasta acá, ahora te toca a tí ser arrastrada a mis planes - Lisa suspiró y se levantó.

- Que sepas que la única razón por la que voy es por tí - Jennie sonrió y como muestra de agradecimiento dejó un beso en su mejilla - ¿Si participó en lo que sea que hagan me darás un beso en los labios? -

- Bueno supongo que está bien - Jennie terminó de guardar algunas cosas en su maleta - Prometo darte un beso en los labios a cambio de que convivas con tu familia -

- ¡Perfecto! Yo nunca dije en cuáles labios - Lisa soltó una carcajada y Jennie solo rodó los ojos.

[...]

El gran plan de Jennie y Eva para reunir a la familia se trataba de nada más y nada menos que de un paseo en yate, probablemente era algo sencillo, pero con la poca disposición de Lisa era mejor hacer algo que no implicará viajar a otra ciudad.

En el puerto, afortunadamente Lisa no dió ningún problema, solo se mantuvo callada. Por otro lado, las demás mujeres se mantenían emocionadas por el paseo, sin embargo, el padre de Lisa compartía el mismo sentimiento de haber sido obligado a ir a participar en dicho plan.

Rosé y Alice tomaban el sol mientras charlaban, por otro lado los más adultos reposaban bajo la sombra, Eva leyendo un libro mientras que el señor Manoban luchaba por mantenerse despierto y no ser objeto de burla.

Jennie salió del vestidor con su traje de baño puesto, mientras que Lisa estaba recostada en las sillas aburrida y fastidiada hasta que la vió.

- Wow, es verdad que te he visto desnuda, pero déjame decirte que con ese bikini me vuelves loca - Lisa observó de arriba a abajo con descaro, pero Jennie simplemente negó riendo.

- Cámbiate, te esperaré para ir con los demás - Lisa suspiró.

- Jennie, sabes que no quiero estar aquí -

- Entonces veo que no deseas tanto que bese tus labios - Lisa arqueó unas cejas - Y no me refiero a los de arriba - ésta se cruzó de brazos y luego de mostrarse indignada le guiño el ojo.

- Voy a cambiarme enseguida - entró rápidamente al vestidor.

Una vez que Lisa se cambió salieron a convivir con las demás, Jennie se unió a la plática con las hermanas, Lisa se limitó a escuchar y sonreír cada que Jennie la miraba con desaprobación. Pasó un tiempo hssta que decidieron hacer un concurso de clavados.

- Vamos Jennie demuestra quien es la que manda - Rosé apoyaba desde el agua a Jennie quién seguía dudando de saltar, mientras que Lisa solo bufó celosa.

- Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nade - cerró los ojos y dió un gran suspiro - ¡Allá voy! -

Jennie saltó y logró hacer un clavado limpio, nada extraordinario, pero había logrado caer con gracia. Después Alice saltó mostrando sus habilidades, hasta que todas miraron a Lisa quien solo se asomaba.

- ¡Vamos Lisa, solo faltas tú! - todas gritaban, pero Lisa solo las ignoró - Vamos Lili - Jennie gritó una última vez hasta que captó la atención de Lisa -

- Odio que siempre encuentras las palabras adecuadas para persuadirme - Lisa se paró y tomó un poco de vuelo hasta saltar y caer casi similar a Alice.

- No me dijiste que eras tan buena en clavados - Jennie se acercó a Lisa.

- Tú nunca me dijiste que tendría que nadar - Lisa sonrió y le arrojó agua al rostro Jennie con su mano.

- Detente tonta - ambas rieron y empezaron una guerra de agua, que se extendió hasta las demás.

- Hagamos una pelea en caballito - sugirió Alice.

- Elijo a Jennie - Rosé se apresuró a decir por lo que la reacción de Lisa no fue la más amigable.

- Tranquila, solo es un juego - Jennie le dijo al oído a Lisa y le dió un pequeño beso en su oreja, después le sonrió y se subió a los hombros de Rosé.

- Vamos Lisa, tú eres más fuerte así que tendrás que cargarme - Lisa asintió y cargo a Alice en sus hombros.

Ya ambas parejas preparadas comenzaron la pelea de intentar derribarse empujandose entre sí, sin embargo, Lisa aún miraba con recelo a Rosé y sus intenciones con Jennie.

Jennie y Alice forcejaban para intentar derribarse, Lisa aprovechando la cercanía lanzó una patada por debajo del agua a Rosé y está inmediatamente se quejó.

- ¡Oye! Se supone que las que pelean son ellas - sin embargo Lisa no hizo caso y siguió pateando - ¡Detente Lisa! - Rosé se tuvo que mover provocando que Jennie cayera al agua, pese a la situación Alice celebró la victoria - ¿Qué te pasa? Se supone que estamos jugando - nado hasta ella para confrontarla.

- ¿Crees que no sé lo que quieres hacer? Haciéndote la amiguita con Jennie - Lisa hablaba con tanto desprecio - Siempre ha Sido así desde que éramos niñas, siempre intentando quitarme lo que tenía -

- ¡Lisa, basta ya! Te comportas como una idiota - Jennie intentó acercarse, pero Alice la detuvo.

- ¿De que hablas? Siempre intenté acercarme a tí, pero tú siempre has sido demasiado arrogante para aceptar a tu familia -

- ¡Tú no eres mi familia, no eres mi hermana! Eres solo alguien que robó mi hogar, mi familia, mi padre y ahora quieres robar a mi novia - los ojos de Lisa comenzaron a ponerse rojos soltando lágrimas.

- Esto se ha salido de las manos, vamos a subir...- Alice intento acercarse, pero Rosé puso una mano indicando que se detuviera.

- No Alice, esto se acaba aquí. Nunca tuvimos el coraje para responder tus palabras despectivas, pero veo que necesitas escuchar la verdad - Rosé suspiró - ¡Eres tan infantil, toda una emo que no puede asumir la realidad y culpa a los demás de lo que le pasa! Siento tanto lo que le pasó a tu madre Lisa, pero no fue mi culpa eso, ni de mamá ni de Alice, mucho menos de papá. Tampoco yo decidí nacer y vivir en la misma casa contigo compartiendo familia, pero intenté llevarme bien contigo, todas lo intentamos, tantas veces fuimos rechazadas por tí y seguimos tratando pese a tu negatividad. Accedimos a este plan para acercarnos a ti, teníamos la esperanza de que la persona indicada te haría cambiar, pero ni siquiera Jennie es capaz de curar lo rota y podrida que estás por dentro. Y no, no tengo ningún intención con tu novia -

Rosé se marchó y con dificultad subió por las escaleras hacia el yate, Lisa miró a Alice quien solo mostró una expresión de tristeza. Cuando vió a Jennie ésta le dió una mirada de decepción y subió junto con las demás.

Lisa se quedó sola en el agua, secaba sus lágrimas mientras gritaba y golpeaba el agua impotente.

𝕰𝖑 𝕮𝖔𝖓𝖙𝖗𝖆𝖙𝖔 | 𝕵𝖊𝖓𝖑𝖎𝖘𝖆Donde viven las historias. Descúbrelo ahora