Contrato de Sangre (HyunLix) - EN EDICION

Capítulo Final - Parte II

PARTE II

[...]

El amanecer llegó y por primera vez en muchos meses, el cielo estaba despejado mostrando un sol ardiente.

Jongho y Yunho los esperaban en el muelle, al verlos que se acercaban sus expresiones faciales se relajaron y corrieron a su encuentro, pero las sonrisas se borraron al ver las tristes caras de todos y al observar detenidamente se dieron cuenta que cargaban con el cuerpo sin vida de Seonghwa.

- ¿Cómo es que... - Jongho no pudo terminar de preguntar cuando vio a Yeosang quebrantarse nuevamente en llanto. Un amargo sentimiento invadió su pecho mientras que un opresivo nudo se formaba en su garganta. Se acercó al otro para darle consuelo entre sus brazos y por primera vez Yeosang lo aceptó como si hubiera esperado todo el camino de regreso por ello.

Yunho, apretó los puños mientras bajaba la mirada. Después de todas las estrategias a las que habían recurrido, dieron por hecho que todo saldría de acuerdo al plan, pero perder a un miembro del clan nunca fue previsto.

Regresaron a su territorio con un profundo dolor en cada uno de los miembros, sintiéndose incompletos. Esa misma tarde le dieron el último adiós a Seonghwa en compañía de los Van Amstel. Lo hicieron de acuerdo a las tradiciones de los Micare. El cuerpo de Seonghwa fue colocado en una cama de madera que más tarde sería puesta en el agua. Vestía una túnica blanca mientras lo rodeaban con coloridas flores. También decoraron el camino del agua con algunas de ellas y usaron linternas para iluminar su recorrido hasta que la luna saliera y reclamara su espíritu. Cuando el ocaso llegó finalmente lo dejaron ir.

Lo observaron alejarse hasta que un destellante rayo lunar iluminó el horizonte.

Por primera vez en toda su vida, Hong Joong se sentía realmente solo, tanto que se aseguraba a sí mismo no ser capaz de resistirlo. Como si fuera un último aliento de esperanza, una mariposa blanca comenzó a rondarlo, parecía que intentara decirle algo. Hong Joong extendió la mano y la pequeña mariposa se posó ahí. Su presencia se sentía como un abrazo al alma del atormentado vampiro. Segundos después, la mariposa se marchó en dirección a donde se había ido Seonghwa dejando a Hong Joong con una sensación inquietante.

- Volveré a verte pronto - dijo viendo al horizonte - lo prometo.

[...]

Después de esa luna de sangre, los días pasaron rápidamente. En Pireville se habló mucho sobre los efectos de la luna aquella noche, aunque en realidad eran los efectos secundarios de la hipnosis de Jongho.

De los hijos Bathory no se supo más. Jeno huyó y Yuta salió ileso cuando el fuego derritió el hielo de Ryujin. Pero sin el rey vampiro y con esa rivalidad entre hermanos, era difícil creer que pudieran atacar de nuevo. Al menos no en ese momento.

Por otro lado, Yeji buscó su propio camino. Aunque logró el objetivo que tenía con su hermana, se sentía incapaz de vivir una vida con libertad sin Ryujin a su lado. Cuando salió del inframundo notó los calurosos rayos de sol y pensó en cómo estos podrían hacerla desaparecer en cenizas. Sonrió ante la seductora idea y lentamente se alejó de las sombras de los árboles, pero antes de salir al sol, fue detenida por Changbin.

- ¡Suéltame! - lo empujó - ¿Qué crees que haces?

- ¿Qué crees que haces tú? - reprendió - ¿Este era tu plan desde el inicio?

- ¡El plan era que Ryujin estuviera aquí!

- Entonces, ¿dejarás que después de todo, tus hermanos se lleven la victoria?, donde sea que estén se sentirán contentos si mueres ahora. Deberías vivir y honrar la memoria de tu hermana siendo feliz. - se dio media vuelta para continuar su camino, después de todo él no podía controlar las decisiones de Yeji - En nuestro clan siempre habrá un lugar para alguien más.