Dulce Destino - FreenBecky adaptación

Capitulo 72

La respiración de Becky se detuvo en su garganta ante lo inesperado de encontrar los labios de Freen tan imposiblemente cerca de los propios.

Le costó un momento demasiado largo retroceder finalmente y se preguntó por su vacilación. Por un momento casi lo había considerado... casi deseado...

No.

La palabra rebotó por los muros de su mente, silenciando los demás pensamientos. No. Había sido descubierta con la guardia baja. Le había costado un momento reaccionar, eso era todo. Le rogó a su corazón que fuera más despacio, asustada de que Freen lo oyera por encima de la película y preguntara qué significaba.

Becky sintió algo suave y ligero rebotar de su mejilla, sus pensamientos al instante variaron. Miró inquisitivamente a la actriz que hacía una mala representación de parecer inocente.

“¿Acabas de tirarme una palomita?” preguntó, su ceja arqueada.

Freen abrió la boca con fingida sorpresa. “Jamás haría algo así,” contestó. “¿Y si se escapó?”

Y aquí Becky pensando que Yuki era la única rara que tiraba palomitas. Pero, al menos, su mejor amiga tenía la cortesía de apuntar a la pantalla de televisión. Becky sonrió, relajándose ligeramente. Si Freen no se sentía Exaltada ¿entonces por qué ella si? Su mirada fue a la pantalla del cine. ¿Cuánto de la película se había perdido? No tenía idea. De todas formas no era tan buena.

Becky agarró un puñado de palomitas y meditó su próximo movimiento. Podía tirar una para que las cosas estuvieran iguales. O dos. O podía ser realmente atrevida y tirárselo entero. El pensamiento le hizo sonreír. Su madre ciertamente no aprobaría esta conducta. Pero su madre no estaba allí.

Esperó hasta que Freen pareció totalmente absorta en la película. Entonces, tan sutilmente como fue posible, llevó su mano a un lado y dejó volar las palomitas.

Sobresaltada por la inesperada acción, Freen saltó en su asiento, enviando el bote de palomitas volando por el aire. Se estrelló contra el suelo varios segundos después, su contenido esparciéndose por el suelo.

Becky se encogió en su asiento, incapaz de dejar de reírse. Varias personas les gritaron que se callasen, lo que sólo hizo a Becky reír más, aunque estaba intentando parar.

Junto a ella, Freen estaba intentando esconder su cara. “¿Quieres salir de aquí?” sugirió la actriz tras un momento.

A través de sus risitas, Becky asintió. Siguió a la actriz por la fila, excusándose cuando tropezaba ocasionalmente con las rodillas de la gente. Finalmente lograron salir y estallaron en carcajadas.

“Nunca he visto a nadie saltar tan alto,” bromeó Becky mientras empezaban su descenso a las ajetreadas calles de Hollywood “Eran sólo palomitas, sabes.”

«¡Cállate!” dijo Freen, riéndose. «Sólo te tiré una, no todo un ejército.”

“:Oh, así que lo admites!”

Freen hizo una pausa. “Um, ¿admitir que?” Sonrió. “Y, de todas formas, soy asustadiza por naturaleza.”

“Bueno, debieras haberlo pensado antes de atacarme,” le dijo Becky “No puedes desafiarme y esperar salir intacta. No funciona así.

"Bastante justo,” contestó Freen, sonriendo ligeramente. “Bueno, ¿qué vamos a hacer ahora que estropeaste nuestra experiencia de ir al cine?”

Becky metió las manos en los bolsillos de la chaqueta, deseando calentarlas. “No sé. ¿Qué quieres hacer? ”

“Lo que quieras.”

“Tengo hambre,” admitió Becky

Freen asintió. “De acuerdo, ¿Qué quieres comer?”