Dulce Destino - FreenBecky adaptación

Capitulo 63

El apartamento de Freen estaba exactamente igual que la última vez que Becky había entrado: vacío. Se preguntó si Freen consideraría contratar un decorador. Al apartamento le vendría bien un sofá o dos.

Siguió a la actriz, las luces encendiéndose mientras Freen pulsaba los interruptores por el camino. Incluso la segunda vez, el lugar era impresionante. La mirada de Becky fue al instante a la vista más allá de las ventanas. Pero las ventanas se volvieron reflectantes cuando se encendieron las luces de la sala. Becky se quedó mirando el reflejo de Freen por un momento y fue hacia la actriz.

La alfombra impecablemente blanca hizo sentirse a Becky como si caminara en una nube. El espacio de la sala estaba desnudo, salvo un ordenador portátil enganchado a un largo cable telefónico. Becky no habría tomado a Freen por adicta a Internet. Pensamientos sobre Frei entraron en la mente de Becky. Habían pasado días desde que había tenido noticias de su amiga.

No había mucho que mirar, así que Becky devolvió su atención a Freen. "¿Querías mostrarme el nuevo añadido a tu sala?" bromeó, refiriéndose al ordenador en el suelo. "Es bonito. ¿Vas a decantarte por una especie de motivo de tecnología frente a simplicidad?"

Los ojos de Freen chispearon con diversión. "¿Cómo lo adivinaste?"

"Supongo que tengo ojo para el detalle," Becky respondió, sintiéndose extrañamente a gusto. "¿Estás online?"

La pregunta pareció desconcertar a Freen. "¿Perdón?"

"El ordenador, ¿está online?" inquirió Becky, preguntándose por qué Freen parecía tan nerviosa. Desde que le había pedido venir a Becky, la actriz había estado actuando un poco extraña. Pero estaba empezando a comprender que Freen Sarocha era una mujer muy rara; en una tonta, aunque encantadora manera.

Freen se arrodilló delante del ordenador y pulsó un botón, que provocó que desapareciera el salvapantallas. "Debo haberlo dejado puesto," contestó. "¿Por qué?"

"¿Puedo revisar mi correo realmente rápido? Probablemente estaré demasiado cansada para hacerlo cuando regrese a casa."

Freen dudó pero dijo, "Claro."

"Si tienes problema con que use tu ordenador, está bien," dijo Becky rápidamente, sintiéndose como si se entrometiera de algún modo.

"No me importa en absoluto," le aseguró Freen. "Sólo desearía tener una mesa o algo."

Becky sonrió. "Sobreviviré."

Se sentó delante del ordenador y fue a su servicio de correo. Entonces esperó un poco ansiosamente a que su bandeja de entrada se cargase.

Frei no se habría olvidado de su cumpleaños, ¿verdad? Cuando la pantalla terminó de cargarse, Becky se encontró mirando las palabras Ningún mensaje nuevo? durante unos segundo más de lo necesario. Defraudada y más que un poco herida, se desconectó.

Freen estaba apoyada contra la barra de la cocina cuando Becky terminó. "¿Todo bien?" preguntó la actriz.

Becky se encogió de hombros. "Sí," dijo, sabiendo que no sonaba particularmente convincente. "Es que tengo esta amiga de la que no he sabido en un tiempo."

"Lo siento," dijo Freen, en un modo que hizo que Becky la mirase fijamente.

Contestó, "No es culpa tuya."

La actriz bajó los ojos y se quedó callada. "Becky," dijo suavemente, sus ojos de repente encontrando la mirada de Becky. "Tengo algo que decirte."

Becky tomó una profunda inspiración, las palabras formándose en sus labios. "Becky, yo soy-"