Capitulo 22

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Pasar la  noche en las mazmorras nunca estuvo en sus cosas por hacer sin embargo ahí estaba en la celda húmeda y oscura de la mansión de Lord Voldemort.

Era muy frío ni una sola manta, ni cena se les fue dada acaban de salir de la gripe y volver a ella no fue apreciado pero no podía hacer nada su varita quedo caida en la habitación lo peor era que sorvolo estaba con el aguantando la humillación su bebé tenía frío así que se había quitado su propia camisa y abrigo al niño mucho mejor lo mantuvo sobre su pecho para proveer más calor todavía tenía fresca muy fresca en su memoria lo que pasó hace horas.

Se sintió impotente y jodidamente enojado. Voldemort no quería que nadie lo tocará, estaba celoso y posesivo. Aun así su manera de responder fue muy Gryffindor impulsivo. Que tonto fue en cree que el hombre hacia algo con buenas intenciones es el maldito señor oscuro el que esclaviso a todos los magos y brujas y sin embargo Harry con su buen corazón creyó que había algo más ahí. Que tonto

Esta tremenda humillacion no se le iba a olvidar si Voldemort lo iba a mantener preso bien puede hacerlo sin embargo no lo volverá a tocar de nuevo ni un solo pelo Harry miro la oscuridad en la celda no había nada dentro ni un solo baño es un milagro que sorvolo no haya ensuciado el pañal todavía  piensa en cuanto tiempo el bastardo lo dejara ahí dentro con su bebé apreta más fuerte a su hijo pobre niño aguantando hambre y frío.


Cuando abre los ojos es el día siguiente la celda tiene más luz  sorvolo tiene la nariz enrojecida Santo cielo.

–Oh... – se cortó a si mismo un ataque violento de tos. Sorvolo se despertó por el ruido el bebé bostezo y tosio también los mocos salieron de su nariz Harry lo limpio tragando saliva el mismo su tos se calmo un poco respiro agitado la nariz tapada. –Lo siento– su voz se oia ronca –¿Te duele? – tocó su garganta

–Enfermo de nuevo

Harry asintió

–Si bebé enfermos de nuevo.

La mañana paso lenta los dos tosian de vez en cuando nunca llegó el desayuno Harry necesitaba orinar sorvolo ensucio el pañal así que se lo quito lo limpio ahora estaba desnudo de esa parte. Miro el pasillo por horas en la misma posición su cuerpo comenzo a sentir fiebre otra vez y sorvolo se miraba sonrojado la nariz aún más roja. Harry se resignó a suplicar salir así que se acercó a los barrotes  tosio un poco y carraspeo para aclarar su voz

–Mi señor permitenos salir – grito con toda la voz que pudo tener. –Por favor. ¡Hola!.

Nadie vino suspiro cansado el niño lo miro

–No fuera

–Todavía no amor

–Comida mamá

Harry se mordió los labios con bastante fuerza se sentían resecos y fríos

–Aguanta un poco sorvolo ya casi vienen a sacarnos por favor.

El niño asintió acurrucandose contra su pecho desnudo y helado no tenía idea de la hora pero fue horas más tarde cuando el hombre bajo a verlos.

–Aprendiste la lección Potter

–Si

No sirve de nada pelear con el tiene todas las de perder. El hombre no se apaciguado para nada sin embargo abre la celda

–Puedes salir espero aprendas a no responderme ni atacarme has probado lo que puedo hacer y solo es un cosa tan leve.

Harry se levanto débilmente con su hijo salió de la celda

Habias sido tu pero me engañaste Donde viven las historias. Descúbrelo ahora