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Sam...


Estaba tan a gusto durmiendo hasta que siento que alguien me abraza. Me quede quieta un momento y después me quite como pude a la persona que tenía encima. La persona cayó en seco al suelo y empezó a quejarse.


-Sam, soy Isaac!

-Lo lamento tanto señor Isaac. -Fui hacía él y trate de ayudarlo, más él solo se sentó en el suelo y empezaba a reír- Está bien...?

-Sam, te estuvimos buscando cielo, mar y tierra casi casi. Nos tenías preocupados.

-Nos?

-Pedro y Lisha estaban igual.

-Ohh. -El que mencionara al señor Pedro me hizo sentir un poco mal.

-Sam, se que no estas en la mejor condición para hablar con él, pero... no importa, solo ven aquí.


Él extendió sus brazos y yo lo abrace. Estuvimos un tiempo así hasta que siento que alguien lambe mi cara.


-Lisha!!


Abrace también a Lisha, me sentía bien, aunque algo me faltaba, pero me sentía bien. Voltee hacía arriba y ahí estaba el señor Pedro, observándonos a una distancia considerable. Mis ojos empezaban a picar. Aunque hizo todo mal, lo extrañaba y lo seguía queriendo. 


Me levante y fui corriendo hacía él. Lo abrace con todas mis fuerzas, y él me correspondió. Puso su cabeza en el hueco de mi cuello y empezó a llorar. 


-Perdón, perdón, perdón. Realmente lo siento. No debí hablarte de esa forma. Lo lamento tanto. -Decía mientras lloraba y me acariciaba la cabeza.

-Tranquilo, más tarde lo hablaremos, sí?

-Lo que tú quieras, solo... no te vuelvas a ir así.

-No lo volveré a hacer.

-Quieres ir a casa o a la casa de Isaac?

-Por el momento me sentiría mejor si fuera a la casa del señor Isaac. No le molesta, verdad?

-Claro que no. 


Seguimos abrazados un tiempo más, ahora yo estaba contra su pecho mientras él seguía repitiendo las mismas palabras "lo siento cariño". 


-Sam, cariño.

-Mmm?

-Tienes hambre?

-Un poco.

-Vamos a comer. Quieres ir a tu lugar favorito de hamburguesas?

-Vamos.



Fui por Isaac y Lisha. El cielo se empezaba a nublar, eso indicaría que llovería. 


-A donde iremos pequeña?

-Hamburguesas.

-Con malteada?

-Y papas.

-Señor Pedro?

-Dime.

-Creo que le debe una disculpa al señor Isaac. -dije en un susurro en donde solo él me pudiera escuchar- Más tarde hablaremos sobre nosotros.

-Estas segura?

-Claro.


Fuimos caminando hacía el lugar de comida rápida. 

-Qué pedirás cariño?

-Una hamburguesa con papas y una malteada de chocolate por favor.

-Isaac. quieres algo?

-Igual que Sam, solo que la malteada de fresa.

-Okey.



...


Comimos en un ambiente un tanto tenso. Cuando termine de comer, agarre a Lisha y la lleve conmigo hacía los juegos del lugar.


-Sam, no te vayas tan lejos cariño.

-Sí señor Pedro.



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Pedro...


Era el momento de disculparme con Isaac.


-Isaac...?

-Mande?

-Lo siento.

-Qué?

-Lo siento tanto. Se que mi actitud no fue la mejor y que me comporte como un completo idiota. Pero realmente lo siento.

-Por qué?

-Porque qué?

-Por qué lo hiciste?

-Me sentía celoso de ti, y por mis acciones no solo termine dañando a las personas más importantes, sino también a la mejor amistad que eh tenido en toda mi vida.

-Espero que algún día pagues todo esto.

-Tenlo por seguro que me llegara el karma. Amigos...?

-Solo... dame un poco de tiempo para poder perdonarte y no tenerte ningún rencor por todo esto.

-El tiempo que tú quieras. -Fui hacía el y le di un gran abrazo, realmente necesitaba a mi mejor amigo.

-Quítate Pedro, me ahogas.


Escuchamos una risita, y sabíamos perfectamente de quien era. Mi pequeña Sam.












Cuando las personas tienen un apego sentimental a alguien o algo, es muy fácil para estas perdonar cualquier cosa. Incluso si lo que hicieron estuvo muy mal. Por favor, si tienen la necesidad de pedir perdón y perdonar cualquier cosa, hable con una persona de confianza y pida apoyo. 

You can be my daddy (Pedro Pascal)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora