You can be my daddy (Pedro Pascal)

#21

Sam...

La tarde empezó a llegar. Estábamos en el patio observando el cielo todos juntos. Se sentía tan bien.

-Sam?

-Si?

-Tienes hambre?

-Un poco.

-Isaac?

-Qué pasa?

-Tienes hambre?

-Sí.

-Podemos pedir pizza?

-No te hara daño, digo, con eso de que estas viejo. -El señor Isaac lanzo una carcajada, que estoy segura se escucharía hasta el final de la calle.

-Muy chistoso Isaac. Espero que cuando llegues a mi edad, te conserves tan bien como yo.

-Cuántos años tiene señor Pedro? -He pasado mucho tiempo con él, y ni siquiera se su edad.

-48 años. Joven, no?

-Y usted señor Isaac?

-Yo tengo 44.

-Se miran de la misma edad.

-Te esta diciendo viejo, Isaac. Muy bien hecho pequeña.

...

Al último no pedimos pizza, pero si salimos a comer. Es un restauran de alitas y esas cosas. Nunca había ido a uno. 

El ambiente era muy relajado. Personas bebiendo tranquilamente, otras bailando y cantando las canciones que pasaban por los televisores que este tenía, y gente simplemente disfrutando en compañía o solos de su comida.

Fuimos por una mesa al rincón, era tipo redonda, tenía stickers para poner de diferentes diseños y una linda luz cálida. Era perfecto.

-Qué pedirás linda?

-Qué es lo más rico de aquí?

-Alitas son la especialidad, pero si no te gusta el hueso, puedes pedir boneless. Es pollo, pero sin hueso.

-Creo que eso pediré.

-Con que salsa te gustarían?

-Mango habanero?

-Es rico.

-Sabor mango con chile. - Parece que el señor Pedro y el señor Isaac eran expertos en esto.

-Bien.

El señor Isaac fue a pedir las ordenes. El señor Pedro y yo nos quedamos en la mesa mientras veíamos a las personas bailar y disfrutar.

De repente escuche una canción que me gustaba, "otro amanecer".

Al parecer, al señor Pedro también le gustaba, pues empezó a cantarla.

-Le gusta la canción?

-De tantas veces que la escuchaste se me pego y me empezó a gustar.

-Perdón. -Dije entre risas. Era gracioso ver como se movía en su lugar al ritmos de la canción.

-Sonara raro, pero... quieres ir bailar conmigo?

-Claro.

El señor Pedro tomo mi  mano y me llevo a la pista. Empezamos a bailar con algo de pena, pues realmente yo no sabía bailar.

-Sam, mírame.

"Hey, you know I'm thinking 'bout you

Please stay, 'cause I've been thinking 'bout you"

Mire al señor Pedro y  sentí como si volviera a nacer de nuevo. Era lindo.

"Vamo' suavecito, me besa' tan bien

Empieza en mi ombligo, termina en mis pies

Beni, no te olvido, yo te digo, no te fallaré

No sé qué te hizo, pero yo nunca te dejaré"

El señor Pedro y yo nos mirábamos, sus ojos repasaban cada una de mis facciones, y los míos hacían lo mismo. 

Se acerco a mi, y por un segundo quise que la mayoría de edad que había entre los dos desapareciera, solo quería que me besara. 

-Sabes que no puedo hacerlo, mi pequeña Sam. Esperaremos hasta que seas mayor.

Cómo sabía que quería que me besara? Acaso lee mi mente?

-Sí, señor Pedro. 

...

Regresamos a nuestra mesa. el señor Isaac ya estaba ahí con nuestra comida. Saque mi cámara y les pedí que posaran. Posaron comiendo alitas, bebiendo sus cervezas, e incluso una donde el señor Isaac le daba un beso en la mejilla al señor Pedro.

...

Regresamos a la casa del señor Isaac, el señor Pedro nos hizo el favor de traernos.

-Te dije que teníamos que ir a tu casa. Ahora como recogeré mi auto?

-Mañana vamos por el, además, estas medio borracho como para manejar. - El señor Pedro arrastraba las palabras y tenía las mejillas rojas. Estaba borracho también.

-Señor Isaac, puede ayudarme?

-En qué linda?

-Puede ayudarme para bajar al señor Pedro.

El señor Isaac y to bajamos al señor Pedro. Lo dejamos en la sala y fui de nuevo al auto por nuestras cosas. Cuando regrese, ninguno de los dos estaba en esta. Pronto escuche risas en el patio trasero, fui y ahí estaban los dos, riéndose por cualquier cosa que se les ocurra. 

-Sam, cariño!

-Mande?

-Ven, tienes que escuchar las historias que nuestro fósil tiene por contar!

-Que no soy un fósil. -Realmente estaban ebrios.

Pasamos nuestra noche llena de risas e historias divertidas, incluso acampamos en el patio. Fue una de mis noches preferidas.

Quisiera comer boneless con Pedro e Isaac.