Bar Verde - [Dekubaku][FINALIZADA]

28

Katsuki e Izuku se encontraban bailando al compas de la música, dejando que sus cuerpos se muevan al son de sus recuerdos. Era como si sus músculos supieran los pasos que deben dar, a pesar que el cenizo ni siquiera había escuchado esa canción en su vida.

Bueno, en realidad no lo sabe. Porque su cuerpo se mueve como si la hubiera escuchado miles de veces, pegando su cuerpo al de su prometido quien tenía su frente unida a la suya, mientras sus ojos estaba cerrados disfrutando ese momento juntos.

Bailaron todos los discos que estaban en aquellas cajas y era como si sus cuerpos recordarán esas melodías, ese ritmo, pero ellos no. Y eso era lo más los mataba, no recordar al otro a pesar que se aman tanto. Terminaron tan cansado que no les dió tiempo de ir a su cama, sino que se quedaron dormidos en el suelo de la oficina de Izuku.

El peliverde acostado en la alfombra mientras Katsuki descansa sobre su pecho ambos arropados en una manta, se dieron cuenta que era de día cuando la pequeña Eri empezó a tocar sus mejillas con un dedito intentado despertarlos.

Al hacerlo, ellos miraron hacia arriba donde la pequeña infante sonrió inclinado su cabecita -¿Por qué están el el suelo, papá Kacchan, papá Izuku?

- ¿Ya es de día? - Preguntó Katsuki levantándose de golpe mirando los alrededores, Eri salto hasta estar en su regazo observando como Izuku bosteza y despierta también.

-¡Si, es hora de desayunar! - Comento Eri agarrando las mejillas de Kacchan -¡Vamos, vamos!¡A comer!

- Tienes mucha energía tan temprano, mocosa - Indicó el cenizo alzando a la infante en el aire quien se rió a carcajadas. Él bostezo contagiando a Eri y luego a Izuku, los tres se rieron por esto - Oye, Eri... ¿Has ido a la playa?

-¿La playa?¿¡Dónde está el mar!? - Dijo ella con entusiasmo en los hombros de Izuku quien la había cargado y puesto ahí, la pequeña sin querer apretó la cabellera de Izuku quien soltó una risita.

- Si, dónde está el mar ¿Has ido?

-¡No!¡Jamás he ido!¡Siempre he querido ir a la playa, ver el mar y hacer castillos de arena! - Mencionó ella con brillitos en sus ojos que se fueron apagando al recordar algo, eso lo noto Katsuki - Pero... Kai nunca me dejó salir y ...

- Oye, no pienses en ese ton-- digo, en ese tipo ¿Okey? Él ya no está aquí, no te va hacer nada. Papá Izuku y yo estamos para protegerte de él.

Eri sonrió y asintió muy alegre.

- ¿Que tal si vamos a la playa hoy, Eri? - Indicó Izuku mirando a la pequeña que abrió sus ojitos asombrada.

- ¡¿Vamos a ir!?¡Si, quiero ir a la playa! - Gritó alzando los brazos y moviendo sus piernitas muy entusiasmada.

- Si... ¡Vamos a desayunar e iremos enseguida al mar!

Katsuki sonrió al ver la escena, sintiéndose pleno, muy feliz. A pesar que en su interior seguía un poco triste de no recordar a Izuku, se conocieron hace años e incluso tuvieron algo, pero sus madres los separaron y no saben porque.

Izuku dijo que después de ir a la playa que ellos frecuentaban en el pasado, de la cuál no recuerdan, irían a la mansión de su madre a preguntarle personalmente sobre su pasado y el porque no recuerdan su relación, que se supone que pasó ya que había pruebas claras de ello.

Al terminar de desayunar en familia, prepararon todo para ir a la playa. La pequeña Eri estaba saltando de alegría con su nueva ropa de playa, un vestido blanco que Kacchan le había comprado junto con otro vestido parecido a una pijama, pero transparente color azul marino y del cuál tenía un lindo moño en el centro.