Justicia. [Wenclair]

Capitulo XVI

"Besos"

—¿Cuándo fue la boda? -preguntó Eugene al escuchar lo que Merlina le acababa de contar-

—No molestes y come. -dijo viendo a su amigo quién solo se rió de ella para después darle un trago a su leche con chocolate- Ahora dime, si me necesitabas acá temprano, ¿por qué no llamaste?

—Tyler me dijo que llevaste a la agente a tu casa, así que, supuse que debías de dormir por lo menos unas pocas horas.

—No tuve sexo con ella, Eugene. -comentó con irritación, Tyler era un chismoso, simplemente siguió tecleando para terminar el correo que necesitaba enviar, con indicaciones e información del pedido que debía realizar su empresa-

—¿Enserio? -Eugene estaba genuinamente sorprendido, Merlina nunca había llevado a nadie a su casa "principal", era raro que simplemente le haya permitido quedarse sin nada a cambio, lo que significaba que...- realmente te estás enamorando, ¿verdad?

—Sinceramente... -mandó el correo y se quedó pensando un rato- No lo sé. Creo que... -antes de que pudiera decir algo su celular sonó y al ver el nombre contestó- ¿Qué necesitas, Divina?

—Nada simplemente recordarte que mañana quedamos en salir y no tienes excusa para faltar. -Merlina suspiró con frustración, se había olvidado de la salida, hoy de nuevo dormiría mal, Divina era del tipo de personas que te mantenía despierta bebiendo hasta por tres días seguidos si se lo proponía, luego recordó que estaba embarazada y le tranquilizó saber que no podía beber-

—De acuerdo, iré. -suspiró y miró a Eugene quien entendió y de inmediato le dió su agenda- ¿A qué hora es?

—A las diez de la noche, vienes por mi cuando salga de trabajar, iremos a una nueva discoteca que abrieron hace unas semanas, dicen que es buena. -sonó feliz al decir eso, sabiendo la respuesta que le daría Merlina-

—Divina, no soy un chófer para ir por ti al trabajo.

—Que raro, como trajiste a Enid acá supuse que era tu nuevo empleo. -Eugene tuvo que reprimir una risa, ganándose una mirada molesta por parte de Merlina-

—Ja ja ja, muy graciosa. -comentó con ironía- ¿Quién te contó?

—Nadie, media estación de policía te vió, lo que me incluye a mí. -mintió a medias, muchos en la estación habían visto pero no identificaron quien dejó a Enid en el lugar, solo hablaban del magnífico auto negro totalmente caro de dónde la Omega había bajado- ¿Hace cuánto se hicieron pareja?

—No somos pareja.

—Ya te estás tardando, date prisa porque si no, te la quitan.

—Definitivamente no iré por ti. -gruñó molesta, aunque sabía que era mentira, terminaría yendo-

—Bien, ¿qué te parece venir por Enid? -esa pregunta descolocó a Merlina de inmediato-

—¿Qué? -no entendía de que hablaba-

—Podría cambiar nuestra salida, irías con ella a solas y no tendrás que soportarme. ¡Es tu oportunidad de oro para declararte! -Merlina lo pensó seriamente, no era mala idea, por supuesto que no pediría empezar una relación, pero era un buen plan-

—De acuerdo. Si apareces en la cita te mato. -amenazó y solo escuchó la risa de la castaña del otro lado de la línea- Hablo enserio.

—Claro que lo sé, no debes recordarme tu fama. -dejó de reír y continuó hablando- Quiero después todos los detalles.

—Pídeselo a Eugene, él siempre te cuenta todo de mi vida. -volteó a ver a su amigo quien hizo como si no supiera que hablan de él y le daba un sorbo falso a su taza vacía-