CAPÍTULO 8 - La Misión (PT. III)

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La puerta se ha cerrado.
Ahora no tengo forma de escapar de aquí.
Mientras maldecía el nombre de la persona que me hizo estar en esta situación, empecé a buscar rápidamente una salida, pues, solo tendría quince minutos.

Mientras maldecía el nombre de la persona que me hizo estar en esta situación, empecé a buscar rápidamente una salida, pues, solo tendría quince minutos

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Continué avanzando por el pasillo que minutos atrás recorría con calma e incertidumbre. Solo que evidentemente, la calma y curiosidad se han ido, y la desesperación ha entrado.
Las paredes tenían pequeñas esferas rojas que emitían un destello igual al color carmesí. No supe que significaba eso, hasta que mis dedos los rozaron accidentalmente.

—¡Agh!

Algo pinchó mi dedo. El líquido rojizo empezó a descender de mi herida, pero eso no me horrorizó en lo más mínimo comparada con la decena de pinchos similares que habían emergido de las paredes. Todos de distintos tamaños, y, asumo, diferentes filos.

Un terror absoluto.

Uno que rápidamente me hizo pensar que atravesar esta parte sin ser pinchada sería mas que complicado, imposible.
Entonces, tras unos segundos, esta intimidante trampa volvió a ocultarse. Al parecer, no debía tocar las luces rojas si no quería acabar siendo perforada por alguna de esas agujas.

Con eso en mente, debía ser precavida y atravesar esta zona, evitando los puntos rojos.

"Es simple. Tú puedes, Nea, ¡Tú puedes!"

Intenté darme ánimos y tras analizar bien el panorama, Solo tendría que evitar los puntos rojos de las paredes.

Di un paso al frente
Sin saber que tenía que ser precavida con lo que estuviera bajo mis pies.

Un pitido resonó en la habitación, y antes de que pudiera moverme del lugar, una gran aguja saltó del piso y atravesó parte de mi pierna

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Un pitido resonó en la habitación, y antes de que pudiera moverme del lugar, una gran aguja saltó del piso y atravesó parte de mi pierna. 

gran parte de ella. 

Fue tal el impacto que pude sentir como aquél filo perforaba, sin mayores complicaciones, parte de el hueso de mi pierna.

Un grito ahogado se hizo presente. Las lágrimas cayeron por culpa del inmenso dolor que sentía. Mis medias se tiñeron del color rojizo de la sangre.

The Stars Shine At the Night Sky| PT. III | TLSWC |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora