ADVERTENCIA:
A diferencia quizás de las otras dos partes de esta obra, The Stars Shine PT III:"The Stars shine at the night sky" contiene escenas, momentos y arcos los cuáles tratarán con temas como la depresión, el suicidio o ideas suicidas. Si est...
La brisa nocturna golpea nuestros rostros en la soledad del prado donde estábamos.
—¿Ya puedes caminar mejor?—
Lilith nos dió un poco de atención médica improvisada, y logró encontrar formas de tratar nuestras heridas a su modo.
—Si, estoy mejor. —
Moon responde a la interrogante de la peli-naranja. Y esta, tras comprobar que él ya podía moverse más o menos de forma "natural", se prepara para irse de ahí.
—Está bien. Ya no tengo nada mas que decirles. Moon, tu pierna no tardará demasiado en sanar, solo intenta no forzarla mucho. Y tú, Nea...—Nuevamente me lanza esa mirada de desprecio. — Bueno, resale a Dios para que no tengan que amputartela tuya. —
Dijo sarcástica, mientras se retiraba.
—Bueno, al menos me acompañó en esto. No como alguien. —Moon responde en el mismo tono pasivo-agresivo en que ella habló. —
—Si, tal vez. —Lilith se voltea una última vez y me mira fijamente. —Pero, no olvides de quién fue la culpa...—
Tras eso, ella se aleja de nosotros. Dejándome a mi con un mal sabor de boca.
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Durante la caminata de regreso a casa hubo silencio. Silencio mortal. Me llevaba detrás, en su espalda nuevamente. Yo, débilmente me aferraba a él, cerrando mis ojos y deseando desaparecer. Desaparecer del mundo. De la faz de la tierra...
"Es mi culpa."
Esas palabras no dejaban de retirarse en mi mente, como duras afirmaciones que, lamentablemente, eran realidad. Realidad para mi. Realidad para todos.
—Es todo...mi culpa...—
—No digas eso. No todo es tu culpa siempre. Y creo que esta vez...-
Las palabras que débilmente dije, esperando que nadie las oyeran, pudieron ser escuchadas por él. Quién me llevaba encima de su espalda pese a todos los problemas que hoy le generé.
—Lo digo enserio...— Murmuró nuevamente mi quebrada voz, palabras que el intentaría refutar. —
—Nea...-
Difícilmente podría convencerme de lo contrario.
—Siempre termina volviendo todo a lo mismo. Siempre volvemos a...mi traición—
Puedo oír su voz igualmente débil como la mía.
—Esto no es culpa de nadie... Simplemente, son cosas que deben pasar porque así lo quisieron ellos, las estrellas.—El eleva su mirada momentáneamente. —Deberías tener mas confianza en ti y dejar de intentar cargar con todo. —
—¿Mm? ¿A qué te refieres?—
—Tal vez... Intentar perdonar eso que hiciste en el pasado. Se que a día de hoy te arrepientes, lo entiendo, yo también me arrepiento de muchas cosas, pero sencillamente debemos aprender a dejarlo atrás. —
