The Stars Shine At the Night Sky| PT. III | TLSWC |

CAPÍTULO 22 - Nostálgicamente

Nostálgicamente.
Nostálgicamente observo las hojas del otoño caer.
Nostálgicamente veo el mundo arder.
Nostálgicamente yo caeré.
Al abismo.

Una criatura inmortal viviría en mi casa de ahora en adelante, y yo no lo sabía.

Los días posteriores a la caótica celebración, no ocurrió mucho.
Mi rutina seguía igual.
La de mí familia también.
Solo había algo que nos preguntábamos todos de manera casi diaria.

—¿Donde está Lilith?—

O también

—¿Cuando vendrá Lilith?—

  Los que más hacían está pregunta diariamente eran, nunca mejor dicho, Cosmo y Nea.
Cosmo, quién, con algo de entusiasmo y preocupación esperaba frente a la puerta todos los días para ver si lograba divisar la silueta de su compañera a la lejanía acercándose. Y Nea, quién se ocultaba en su cuarto apenas llegaba de la preparatoria para no tener que ver a aquélla figura traumática nuevamente.
¿Acaso podía culparla? Digo, casi le quita lo mas preciado que tiene, su vida, no es de extrañar que le de pánico el pensar en que alguien así ahora viviría obligatoriamente bajo su techo.
Para eso, siempre subía a su habitación e intentaba ayudarla, aunque sintiera que le estuviera hablando a una piedra, de lo inútil que era.

—Si ella te llegara a poner un dedo encima, no dudaría en cortárselo las veces que fuera necesario para dejarle en claro que contigo no debía meterse. —

Aunque ella sonría y diga que no es eso lo que le asusta, sabía perfectamente que no estaba siendo honesta.
Porque Nea nunca fue honesta.
Y así todos los días, repetía la misma rutina, la misma escena, diferentes palabras, mismo significado. Y ni así podría convencerla de poner un pié fuera.
Yo era el encargado de llevarle la comida hasta su habitación*¹, y ella tímidamente la recibía con un claro temblor en sus manos, y se quedaba unos segundos con la puerta ligeramente inclinada comprobando si estaba bien el alimento. Si no le convencía, me lo daría y me diría que lo comería después. Ese "después" era a la mañana siguiente, con los restos de comida en el tacho de basura.

Y siempre supe que ella era así. Conocía a Nea desde la semana después de su nacimiento. Sabía que gran parte de su vida se había regido por esa actitud desconfiada y más con personas que le habían intentado hacer daño. Pero, ¿Por qué con nosotros?

Alex no sabía nada, y al igual que Cosmo, se preguntaban constantemente por la extraña actitud de su Hermana "menor"/Hija. Pero no había respuesta clara que yo pudiera dar. Solo fingía no entenderlo al igual que ellos.

Aunque,
Aveces la tentación llamada "culpa" me intentara ganar. Sabía que jamás caería en ella.
Porque hacerlo solo provocaría mas problemas.