CAPÍTULO 55- Nea-Esther

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¿Quién soy?
¿Qué se supone que soy?

¿Soy Nea?
¿Soy Esther?
¿Soy Prower?
¿Greengater?
¿Quién soy?

Nea.
Nea-Esther.
Ese es mi nombre. Soy Nea-Esther.
Soy yo.
Yo soy yo.

Nací en el abismo del tiempo. En las raíces de las dimensiones.
No soy y nada, y soy todo.
No soy todo, soy nada.

Soy Nea.
Soy Esther.

Soy...

(...)

Nací en el espacio tiempo. En el abismo del tiempo.
No tenía identidad.
No era nadie en ese momento.

Cuándo abrí mis ojos por primera vez, ella estaba ahí.

-Bienvenida al mundo, marioneta. -

Y entonces empecé mi travesía.
Un cúmulo de recuerdos traumáticos y desgarradores venían a mi cabeza en gran velocidad. Eran hermosos, tristes, desgarradores, horribles, aterradores...

Toda una vida entera.

Cuándo volví a parpadear, estaba en una sala de hospital. Escuchaba un llanto, un llanto lejano. Todo se veía negro, y luego borroso. Arriba, vi una mujer de pelo verde y ojos azules mirándome fijamente.
Estaba preocupada y con ojeras.

-Tú serás Nea. -Dijo mientras me acariciaba. -Nea Esther Prower... -
Y ahí me di cuenta.
Era yo quién estaba llorando, y alguien más...
-Él es tú hermano. -Me dijo mientras me acercaba al origen del otro llanto-Alexis, Alexis Miles Prower, Como tú papá. Él no está aquí ahora, pero pronto estaremos juntos, se los prometo. -

Su presencia se sentía cálida y familiar.
No podía entenderlo en ese momento.
Tampoco entendía sus palabras.
Hasta ahora.

Luego, me llevaron solo a mí para hacerme diversos exámenes y pruebas. Los doctores me miraban con preocupación, y yo no lo entendía.

-Esto... Esto no es heterocromía. -

No entendía nada. Sólo lloraba porque me irritaba la forma en la que estiraban mi ojo. Era extremadamente sensible.
Quería volver a estar con aquélla mujer que me trató con gentileza.
No con estos hombres extraños que me hacían sentir vulnerable.

-Tendremos que hacerle un montón de preguntas a la madre. -Una de las implicadas añadió. -De que especie son, tipo de sangre, y comprobar si había compatibilidad entre especies-Dijo-Quizás podría ser parte de su albinismo. -

-No... Es cristal. -

Al pasar una luz blanca en mi ojo, rápidamente sentí una irritación terrible.

Una irritación horriblemente dolorosa.

-N-no puede ser...-

Ambos estaban fascinados. Ignoraron mi llanto completamente y fijaron su atención en el fenómeno que veían.

-Esta niña... ¡Esta niña debe ser estudiada!-

-¿Su hermano también tenía un ojo así también, no?-

-Es cierto, quizás ambos sean reencarnaciones de deidades o algo. -

"¿Deidades? ¿Reencarnaciones? ¿Qué es eso? ¿Por qué yo sería eso?"

De cualquier forma-

"Mamá" se negó a que siguieran "examinándonos".

Tal vez se percató de lo jodidamente cínicos que eran esos sujetos al decir estupideces de ese tipo. Por eso salió de ahí lo más rápido posible.

The Stars Shine At the Night Sky| PT. III | TLSWC |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora