Cuarenta y seis

801 75 37
                                    

"La guerra es un lugar dónde jóvenes que no se conocen ni se odian se matan entre sí, por decisión de viejos que se conocen y se odian, pero no se matan

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"La guerra es un lugar dónde jóvenes que no se conocen ni se odian se matan entre sí, por decisión de viejos que se conocen y se odian, pero no se matan."

Erich Hartmann.

..

[NARRA HARRY]

Con la muerte de Hitler en mayo de 1945, los crímenes nazis finalmente cesaron, pero la guerra en sí, no acabaría hasta varios meses después, cuando los soldados rusos, estaunidenses y franceses hubieran saciado sus ansias de venganza y acabado con lo que restaba de nuestro país. Se dividieron nuestras tierras como alguna vez nos dividimos las suyas y fueron largos meses tras la huida de los soldados alemanes que iban a perderse por diferentes rumbos. Se rumoraba que algunos abandonaron el continente, otros se arriesgaron a regresar a sus tierras, pero eran detenidos en el camino, convirtiéndose en prisioneros de guerra. Especialmente los soldados de la SS. Para ellos lo peor aguardaba. Asesinados a sangre fría, expuestos después en las plazas, como alguna vez lo hicieron con los judíos.

Me negaba a compadecerme de mi gente. Merecíamos que la furia europea cayera sobre nuestras cabezas, pero era horrendo lo que el ser humano podía llegar a hacer por rencor. Muy parecido a lo que yo había hecho por tantos años después de la muerte de mi hermano.

Tenía mucho tiempo para pensar en eso cuando estaba solo en medio de esas cuatro paredes. Extrañando lo que fui en mis primeros años de vida. Había vivido más tiempo con odio que sin él. Ni siquiera recordaba lo que era vivir sin miedo, sin culpa, sin vergüenza, sin salida. Desde que en mi infancia presencié la decadencia de mi familia, nunca volví a saber lo que era vivir en paz. Ahora, todo lo que quería era que se me concediera la oportunidad de abrazar a mis padres, pedirles perdón y entregarme al pueblo europeo, para que me mataran a golpes con palos, me ataran con cuerdas a un mástil y levataran mi cuerpo desnudo y sin vida. Ya no era capaz de imaginar otro futuro más que ese. Más aún porque sabía que era así como morían las personas como yo.
Lo supe durante las últimas semanas desde que decidí escribirle a mi madre de nuevo y ella me contó lo que se había convertido la vida en Alemania.

«No queda nada, estamos en ruinas. El país se ha vuelto un lugar de mujeres, niños y ancianos abandonados. Vivo con el miedo de que los soldados entren a la casa, maten a tu padre y hagan conmigo cosas horrendas. Las mujeres se han vuelto motín de guerra, los soldados las violan a donde vayan. Dicen que muchas de ellas se suicidan desde que los escuchan entrar a sus casas. Otras sobreviven a esos ataques. He visto a varias mujeres y niñas golpeadas en las calles. A los militares alemanes les va peor. Ahora mismo hay un hombre colgado de un mastil en la plaza. Dicen que era de la SS. Lo desnudaron, lo golpearon hasta matarlo y lo levataron por los brazos. Tenemos miedo de salir de casa y no hay comida, incluso el agua está racionada. No sabemos por cuánto tiempo viviremos así, pero rezo todos los días para que la guerra se acabe. Hijo, eres mi amor más grande y tengo el corazón destrozado por haberte enlistado en esta maldita pesadilla. Nunca podré perdonarmelo. Yo era tu madre, debí protegerte, debí luchar por ti, no mandarte a luchar por nosotros. Por favor, no vengas a casa, te mataran. Nosotros iremos por ti cuando todo esto se acabe. Escóndete y cuídate mientras tanto. Te amamos y estas en nuestros pensamientos todo el tiempo. Por favor, escribeme de nuevo en cuanto puedas, dime lo que haces y si estás bien.»

La chica bajo la farola |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora