Capítulo 31

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Daryl y Ace caminaron en silencio de vuelta al campamento.

Daryl masticaba ansiosamente un trozo de paja, todavía con ira en su organismo. Ace no creía que alguna vez no hubiera ira en él, pero ella podía ver que estaba haciendo su mejor esfuerzo por no estallar. Joder, ella estaba sorprendida de que siquiera estuviera cerca de ella en ese momento.

Pero esa era una situación en la que todo el mundo estaba tratando de no explotar. Todos corrían de un lado a otro, tratando de hablar con Hershel, hablar con Shane, o tratando de averiguar qué diablos iban a hacer. Todos estaban al límite como deberían haber estado desde un inicio, no dando vueltas sin ninguna preocupación en el mundo.

Todo el cuerpo de Ace estaba tenso, todavía en guardia sobre toda esa situación. Ella podía sentir que algo iba a suceder, algo malo. El grupo no sabía cómo manejar situaciones como esas, y especialmente no sabían cómo manejar a Shane. Ella también estaba molesta porque eso estaba desviando toda su atención de la búsqueda de Sophia. Era como si ocurriera una distracción y todo el grupo se volvía presa del pánico.

Cuando volvieron al campamento, Daryl la miraba de reojo. Podía ver su cabeza trabajando en círculos, como siempre lo hacía, y se preguntaba qué tipo de plan estaría pensando. Ella era la única allí que realmente pensaba en todo.

Ace se acercó a la caravana, subió rápidamente las escaleras para entrar y coger el mapa que habían estado usando para la búsqueda, y luego volvió a salir. Miró a Daryl. "Voy a ir a buscar, a ver por dónde seguimos", murmuró, mostrando el mapa.

Daryl entrecerró los ojos, pensando que nadie más iba a hacer nada. "Iré contigo".

Ace se sorprendió, pero en realidad, no tanto. Él era el único que tenía la cabeza un poco fría para hacer lo que había que hacer mientras el resto del grupo corría como pollos sin cabeza.

Ace asintió y se dio la vuelta para subir por la escalera, guardándose el mapa bajo el brazo mientras lo hacía. Se subió al techo y caminó hacia la parte delantera de la caravana, dejando el mapa y usando la silla como peso para evitar que saliera volando.

Daryl gruñó al levantarse, con las heridas aún doloridas, y se acercó mientras Ace se arrodillaba para aplanar el mapa. Se unió a ella y se sentó.

Ace empezó a mirar el mapa, entrecerrando los ojos al recordar que ni siquiera podía ver. Se estaba hartando de tantas enfermedades. Buscando en el bolsillo de la camisa que le había dado Daryl, sacó el par de gafas de Dale y se las puso.

"¿Para qué diablos son esas?" Daryl señaló, haciendo señas a sus gafas.

Ace lo miró. "Para ver", dijo con indiferencia.

Daryl la miró con los ojos entrecerrados, pero luego se limitó a resoplar. "¿Ahora te vas a quedar ciega?"

Ace se encogió de hombros. "Mejor que verte la cara".

La ceja de Daryl se alzó ante la sorpresa de su broma, y Ace se congeló por un segundo. Se le había escapado. Se encogió de hombros, esperando que Daryl dijera algo. Pero lo único que hizo fue soltar una carcajada. Ace sonrió satisfecha. "Sí, sigue haciéndote la linda, Ratón. Ya veremos hasta dónde te lleva".

Ace se rió para sus adentros y Daryl puso los ojos en blanco, sólo molesto de que esa chica no lo hiciera enojar. Si alguien más le dijera eso, le arrancaría la cabeza. Era tan jodidamente estúpido.

"Concéntrate en el mapa", le señaló Daryl y Ace negó con la cabeza, volviendo a bajar la mirada e intentando volver a la seriedad de encontrar a la niña.

The Sharpest Lives | ESPAÑOLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora