Capítulo 43

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A la mañana siguiente, Ace se despertó de un salto al oír que llamaban a la puerta. Inmediatamente, se sentó en la cama y se llevó la mano a la cadera en busca de su cuchillo. Al no sentirlo, el pánico se apoderó de ella y empezó a buscar a su alrededor. Por suerte, no tuvo que buscar demasiado, ya que el cuchillo estaba sobre la mesilla de noche.

Al ver la mesilla, recordó su situación y dónde se encontraba. Era la primera noche en muchas que no se despertaba en la tienda de Daryl. Se había acostumbrado tanto a verlo cada mañana que ahora, un dolor le atravesaba el corazón.

Por lo general, despertarse en una cama grande y segura en una casa sería un alivio. Pero ahora para Ace, era una pesadilla.

Como ella tardó demasiado en responder a los golpes en la puerta, Hershel se permitió entrar, cerrando la puerta tras de sí.

"Buenos días", habló con calma. "¿O debería decir buenas tardes? Necesitabas dormir".

Ace no tenía ni idea de qué hora era. Apenas recordaba el final de la noche anterior. Debía de haberse desmayado por no dormir en todo el día. Las últimas 48 horas habían sido como un sueño.

Inmediatamente, la mente de Ace volvió a pensar en Dale. El corazón le dolía más que el cuerpo al pensar en él. Probablemente murió pensando que Ace iba a morir. Probablemente nunca hubiera creído que ella estaría ahí ahora. Ella desearía que así fuera.

"Quería hablar contigo sobre este archivo del CDC", anunció Hershel mientras se acercaba a las cortinas y las abría, permitiendo que la luz del sol llenara la mayor parte de la habitación. Ace miró por la ventana. El campamento estaba demasiado lejos, a un lado, y el sitio de Daryl estaba a media milla de allí, por lo que nunca podría verlo.

Pensó en Daryl y en las cosas que había dicho. No tenía ni idea de dónde estaba y le dolía no poder ir a buscarlo. Odiaba la idea de perderse una cacería.

Cuando Hershel se acercó a la cama, Ace vio que llevaba el expediente en las manos. No tenía ni idea de cómo lo había conseguido, su bolsa se había quedado en la caravana. Nadie sabía que existía, aparte de Daryl. Ace sintió una especie de esperanza de que fuera Daryl quien se lo había dado a Hershel. Tal vez Daryl no la odiaba.

"Tengo algunos libros de cuando mi primera esposa cayó enferma", dijo Hershel mientras acercaba una silla y se sentaba al lado de la cama. Ace recordó que había mencionado que su mujer tenía cáncer. Lo más probable era que muriera de eso. Muy edificante. "Lo revisé y comparé sus medicamentos anteriores con los de esta lista".

Ace miró la carpeta que tenía en las manos. Sólo sacó una hoja de papel. Ace se preguntó si lo había revisado todo. Había una nota que Jenner le dejó a la que nunca pareció encontrarle sentido. Algo sobre que los sujetos de las pruebas habían dado positivo. Pero, ¿por qué iba a saber Hershel algo de eso?

"Parece que la medicina que habías estado tomando te tiene en el buen camino", Hershel revisó la lista. "Ahora, cualquier información que puedas proporcionar sobre tu tratamiento anterior sería de gran ayuda", Hershel dejó el archivo y miró a Ace.

El archivo que tenía contenía la mayor parte de la información sobre el cáncer de Ace. El nombre, el lugar, la medicina y un vago plan de tratamiento. Jenner, por muy loco que estuviera, ayudó mucho a Ace. Ahora, Ace sólo tenía que recordar todo lo que pudiera para ayudar a acotar el plan de tratamiento.

"Uhm", Ace tuvo que pensar, con la voz ronca porque aún no había hablado. Tuvo que devanarse los sesos pensando en los horribles recuerdos que tan profundamente había bloqueado. Se estremeció cuando empezó a recordar, con ganas de vomitar sólo de pensarlo.

The Sharpest Lives | ESPAÑOLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora