En Pausa- ¿Qué pasaría si.....?

- Capitulo 26 -

Tenia una sensación extraña, no había quedado tranquila después de haber escuchado a Artesian decir que si me revelaba el motivo por el cual se había ido, me arrepentiría de divorciarme no me tenía tranquila.

Pese a que pensé en cada una de las posibilidades. Se perfectamente que no existe tal motivo para hacerlo, quizás en algún momento Maeve impidió que tomara la decisión pero ahora que no esta... ya nada me unía a ella.

Termine de trabajar justo cinco minutos antes del horario de salida, planeaba escabullirme sin que Nicky lo notara y se quedara junto a mi como una sombra. Pues a pesar de todo, no queria seguir involucrando a mas personas en nuestros problemas con Artesian.

Pero no funcionó, apenas llegue al estacionamiento para ir por mi jeep. Nicky estaba como una mafiosa esperándome junto al Jeep, traía sus lentes de sol puestos y estaba de brazos cruzados.

- ¿Pensabas irte sin mí, Morticia? - se acerca a mi y pone su mano frente a mi- dame las llaves, yo te llevaré.

- No, definitivamente no - paso al lado de ella y abro la puerta del conductor para subirme- si quieres acompañarme, lo harás como mi copiloto pero no te subirás a manejar.

- ¿Te han dicho que te apegas mucho a las cosas materiales? Yo creo que no, porque de lo contrario me darías tus llaves - sube al auto y salimos del estacionamiento rumbo a la casa que hace tiempo atrás llamaba hogar.

- Si, claro. ¿Tengo que recordarte acaso que en la universidad cuando te di mis llaves mi auto terminó metido en un lago?

- Jamás sucedió ese suceso, Alex. Y no voy a debatir contigo porque no ocurrió.

- O porque no quieres recordarlo. Mejor dime, ¿como han estado con todo lo del embarazo?

- Bien, ha sido un poco difícil. Amo a Lorna pero me cuesta soportar sus cambios de humor y sus antojos a las tres de la mañana.

- Creo que el mejor consuelo que te puedo dar es que cuando veas a tu bebé, no te importará recordar cuantas veces fuiste por helado a las 3 de la mañana. Todo sacrificio valdrá la pena.

- A veces quiero que el tiempo pase muy rápido y poder ver a Lorna com nuestro hijo en brazos. Pero también quiero disfrutar ver como su vientre crece y crece.

- Eso es la maternidad, Nicky. - veo que ya estamos prontas a llegar a casa así que me detengo a media cuadra.

- ¿Que pasa? ¿Te arrepentiste de ir?

- No, pero si vas a acompañarme te quedarás en el auto esperándome. No vas a entrar a provocar a Artesian, solo esperarás paciente por mí.

- Dios, ¿Y pretendes que me pierda toda la diversión?

- Si. - vuelvo a avanzar hasta la entrada de mi hogar.

- Ok, esperare por ti pero si no vuelves al auto en un tiempo razonable entrare por ti.

- Lo que digas, Nicky.

Tomo mis llaves y mi teléfono para entrar a casa, no es necesario que abra la puerta porque apenas me detengo a abrirla, una de las empleadas me deja ingresar sin necesidad de anunciarme.

Todo parece estar en calma, la casa se ve como siempre pero no me fío de esa falsa tranquilidad.

- Adelante, señora. ¿Quiere que le prepare algo?

- No, no te preocupes. Vine a buscar el resto de mis cosas, ¿sabes donde las dejo Artesian?

- Están arriba en su despacho.

Asiento y subo las escaleras para dirigirme a mi despacho, se siente tan extraño estar en la casa que por tanto tiempo debió sentirse mi hogar. Paso por la habitación de Maeve, que para el día de hoy está completamente vacía....