𝐔𝐍 𝐓𝐈𝐑𝐎 𝐃𝐄 𝐀𝐌𝐎𝐑 || SHIPS VARIADOS || (AU ESCOLAR)

CAPITULO 25

Los días en la escuela pasaban bastante lento, todos los miraban mal, como si supieran que ellos fueron los responsables de la muerte de Mbappé.

Se juntaron en el descanso, la única compañía que tenían era de ellos mismos.

No estaban en su mejor momento, pero se habían vuelto más unidos que nunca.

Julián acariciaba el cabello de Enzo, haciéndole mimitos mientras hablaba con Di Maria y de Paul. A lo lejos, pudo ver a caras conocidas que no le agradaban en lo más mínimo.

Paulo venía tomado de la mano con Duki a sus lados estaban Thomas, Tiago y Mauro.

— ¡Hey! Enzurri. -Habló Lombardo, saludando a Enzo.-

Este se había levantado para saludar de igual forma al azabache.

Los presentes se miraron confundidos, esperando una respuesta de parte de Enzo.

— ¡Ah! Perdón. -Dijo algo apenado.- Ellos son unos amigos míos.

Fue interrumpido por Paulo, quién mostró una de sus mejores sonrisas.

— ¡Hola! Un gusto a todos, soy Paulo, este de acá es mi novio, Duki. Y los tres giles de atrás son Thomas, Mauro y Tiago. -Habló por todos.-

Los chicos los recibieron, se saludaron entre ellos. Les parecía un poco raro a algunos pues se habían topado con esos chicos varias veces algunos meses atrás y jamás les habían hablado.

— Un gusto conocerlos a todos y...¿Qué los trae por acá? -Preguntó Lionel.-

— Nada en específico, supongo que nos aburrimos de ser un pequeño grupo de cinco, queremos conocer más gente y eso. -Mauro hablo con tranquilidad, esperando a que su mentira fuera creíble.-

Ninguno quería ser grosero, las circunstancias en las que se encontraban no les permitía unir gente a su grupo, era arriesgado.

— Oh...¿Están insinuando que quieren estar en nuestro grupo? -Preguntó nuevamente Lionel.-

Los cinco chicos asintieron.

— No es nada personal chicos pero, no estamos dispuestos a recibir más gente en nuestro grupo. -Dijo con algo de dificultad, intentando no sonar tosco o grosero.-

Se miraron entre si, todos miraron a Tiago, era su turno.

— Ah...Está bien, no se preocupen. -Sonrió con una mueca Thomas.-

— ¡Ya sabía! Nadie nos acepta, somos unos rechazados...¿Será por qué somos unos perdedores? ¿Qué tenemos de mal? ¿El problema somos nosotros? -Preguntó Tiago, con lágrimas acomulandose en sus ojos, abrazando a Lombardo.-

Fue una acción repentina que rápidamente conmovió a Guillermo, Javier, Hirving, Lainez y Guardado.

Algunos de ellos se sabían defender, es por eso que nunca fueron golpeados o burlados pero jamás fueron aceptados en un grupo, así formaron el suyo.

— ¡Esperen! Si hay lugar, vengan. -Habló Ochoa, ganándose una mirada confundida de Lionel.-

Tiago soltó a Lombardo y se lanzó a abrazar a Guillermo.

— ¡Gracias wacho! Juramos intentar ser tan piolas como ustedes.

Guillermo sonrió un poco.

— Bueno si van a ser parte del grupo, deben conocernos. -Ronaldo tomo la palabra.-

Así, todos se empezaron a presentar.