❤️‍🩹 Capitulo 19 ❤️‍🩹

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📞 Teléfono 📞

S. Park: ¿Ya tienen la foto?

X: Si señor Park, tiene alguna idea de donde podríamos empezar a buscar.

S. Park: Enfóquense en las calles, el no tiene a nadie que lo pueda ayudar, lo más probable es que este pidiendo dinero en algún parque o algo parecido, cuando se fue no tenía dinero ni para comprar un chicle, así que lo más probable es que esté de pordiosero en la calle.

X: Esta bien señor, en cuanto tengamos noticias de él le avisaremos de inmediato.

S. Park: Perfecto, espero que sea pronto tengo deudas que saldar y ese idiota tiene que regresar a trabajar, hasta luego.


🌪️🌪️🌪️


Un nuevo día había llegado y ahora Jimin estaba por primera vez en el centro comercial más grande de todo el país, y el pequeño Hobi brincaba emocionado de un lado a otro viendo cada vitrina de las tiendas.

Él nunca había salido de la habitación en la que vivían y para él estar en ese lugar era como un sueño.
Jungkook los había despertado temprano después de hacer el desayuno, desayunaron y les dijo que irían a comprar ropa y algunas cosas que necesitarán, entonces Jimin fue a bañar a Hobi y le puso un cambio de ropa que traía el niño en su mochila y él se puso la ropa que Tae le había llevado un día antes.
Agradecía que los pantalones estaban algo flojos y la camisa también, pues sus heridas aún dolían y ardían al tratar de tocarla, Jungkook se encargaba de untar la pomada en cada herida y después calmaba su dolor con tiernos besos.

Entraron de tienda de tienda en busca de ropa, Jimin ya estaba cansado traían suficientes bolsas con demasiada ropa, pensaba que podía cambiarse 3 veces al día durante una semana y aún así no repetiría outfit.
También habían comprado muchas cosas para el pequeño y agregaron al carrito unas cuantas camisetas con lindos astronautas en ella.

Jungkook insistió en pasar a una tienda de perfumes y cremas para su chico bonito, pues le dijo que era importante mantener su piel linda e hidratada, pero lo que no le dijo era que él quería poder untar esas cremas y lociones en su cuerpo, amaba sentir la piel de Jimin cuando le ponía su pomada para las heridas, pero esta vez quería hacerlo por placer y no por necesidad de curar a su chico bonito.

Después comprar lo necesario y cosas de más se dirigieron al supermercado para abastecer la alacena, pues Jimin había insistido en cocinar pues su pequeño tenía que comer saludable no era bueno comer tanta comida rápida, tal vez unos días a la semana estaba bien pero no para él diario.

Al finalizar el día se dirigieron al departamento y Jungkook pidió ayuda a los guardias para subir las cosas, pues no quería que su chico bonito cargara nada.
Una vez que habian podido meter todo al fin pudieron descansar un momento sobre la sala, había sido un día agotador y todos estaban exhaustos, quien diría que ir a gastar tanto dinero también era cansado.

Jungkook pidió algo para cenar alegando que todos estaban cansados que ya mañana si Jimin quería lo dejaría cocinar, de mala gana el pelirosa acepto pero se puso feliz por que al fin podria cocinar para su pequeño y también para Jungkook.
Cundo terminaron la cena a Hobi ya se le cerraban sus ojitos del cansancio así que lo llevo a darse una ducha rápida, le puso una de las pijamas de astronautas que le habían comprado y apenas tocó la cama se quedó dormido.

Jimin volvio a la sala donde Jungkook lo estaba esperando nervioso con una caja en sus manos, no sabía que era pero le causaba intriga ver a Jungkook en ese estado, se acercó hasta el y le dio un beso en los labios.

-Ya se a dormido, le di un baño rápido para que durmiera fresco y de inmediato se quedó dormido.

-Me alegro, tú también tienes que ir a descansar bonito, pero antes te quiero dar esto— le entregó la caja a Jimin y este la miro sorprendido, ¿En qué momento compro esto?, estuvimos juntos todo el tiempo— y antes de que lo rechaces déjame decirte que aunque quisiera quedarme aquí todo el día todos lo días no puedo, mañana tengo que volver a la oficina, tengo algunas juntas pendientes y también varias citas, así que lo necesitas— Jimin tenía en sus manos un teléfono de alta gama, nunca se le había permitido tener uno, o más bien no podía comprar uno ya que su padre no le paga a ni un peso— me iré temprano y regresaré como a eso de las 6, que tal si en el transcurso del día ocupas algo o es una emergencia, es necesario que puedas y pueda localizarte por cualquier cosa.

El cuarto rojo ❤️‍🩹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora