Capítulo 12. Algo más.

90 19 31
                                    

Isabella

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Isabella.

Todas estas dos semanas me la pasé pensando el por qué estoy aquí.

Y noche tras noche me quedaba despierta, dando vueltas en la cama, sin poder dormir, aún lloro, aún duele, aún duele porque no lo he soltado, porque él era mi vida.

Pensaba en que, si tan solo no hubiese reaccionado así, si tan solo no me hubiese querido detener, si tan solo me hubiese dicho todo lo que sucedía, pero hasta ahora ni siquiera lo sé. Si tan solo hubiéramos sentido lo mismo el uno por el otro.

Llamo seguido a casa, se cómo está mi hermana, mi papá, mis abuelos, mi mejor amiga y mis amigos, y no sé nada él, tampoco he querido preguntar por él, ni siquiera he abierto mis redes sociales, no desde que llegué.

Mañana tenía mi cita con la doctora Jones, y estaba nerviosa, porque pese a saber ya de cierto modo el por qué estoy aquí aun no sabía cómo decírselo, ni siquiera he topado el tema de Tom, pero creo que es momento de hacerlo.

Aquella noche fue pesada, me costó mucho descansar, sentía el cuerpo pesado, aun así, me levanté, tomé una ducha, me maquillé, al fin había sacado mis blusas bonitas de mi maleta, y volví a vestirme como lo hacía, arreglé mi cabello como más me gustaba, adoraba verme así en el espejo, sé que aún falta mucho para sentirme mejor, pero por algo se empieza.

Fui a clases, mi amistad con Tae ha crecido bastante, de todos mis compañeros él es el único con el que habló, y si, hemos trabajado en conjunto, pero solo son pláticas sobre la materia.

- ¿Quieres que te acompañe a tu cita? -preguntó para después llevar la comida a su boca.

Antes de contestar terminé lo que tenía en mi boca y bebí un poco de mi jugo.

- ¿Irías conmigo? -pregunté.

-Por supuesto que si -respondió.

-Entonces si -sonreí.

No faltaba mucho, solo debíamos terminar de comer e iríamos directo al consultorio de la doc.

En el camino las manos comenzaron a sudarme, y mi corazón comenzó a palpitar con gran velocidad.

-Que gusto volver a verte Isa -sonrió la doctora Rita -veo que cortaste tu cabello -habló muy animada.

-Y también a mi antiguo estilo -respondí feliz, o al menos traté.

Platicamos un poco de lo que he hecho antes de entrar a esa pregunta, la pregunta que más dolería.

-Quedó pendiente una pregunta -habló y mi cuerpo se puso tenso.

-Lo sé -casi lo susurré y agaché la cabeza.

- ¿Quieres responderla? -preguntó antes de todo.

Debía hacerlo, de eso estaba segura, pero me aterraba la simple idea de contarlo.

Inhalé.

Exhalé.

Y hablé.

-Estoy aquí porque busqué escapar de lo que estaba sucediéndome -respondí.

- ¿Escapar? -preguntó.

Y yo asentí, suspiré y le conté toda la historia, como comenzó todo, como nos conocimos, lo que pasó con el abuelo y sucedieron esas cosas, cuando papá lo supo, cuando me fui de casa, lo feliz que había sido por algunos meses, cuando volvimos a ser una familia feliz, y todo se derrumbó, cuando la abuela murió y cuando Tom, hizo lo que hizo.

-Ni siquiera he podido dejar de pensar en él -para ese momento yo era un mar de lágrimas -se volvió mi mundo y todo se volvió un infierno, estaba decida a venir, cumplir ese sueño que tenía y que mi mamá igual.

- ¿Tu mamá? -preguntó.

-Si, ella... -otro tema que dolía -ella murió cuando yo tenía siete años mi mamá murió de cáncer y... asumí el rol de mamá para mi hermana -sorbí mi nariz -tiempo después encontré el diario de mamá, ahí, escrito por ella, lo que quería estudiar y en donde, y se volvió mi sueño, es... sentirla cerca de mí.

-Isa has pasado, por tanto, y... has logrado un gran avance -habló -lo hablaste y fuiste valiente al hacerlo.

Y me sentí un poco mejor, mejor por el hecho de que sentía un alivio, un peso menos, como si de mi se hubiese ido una carga muy pesada. Tan solo con habérselo dicho.

Estuve ahí alrededor de dos horas, y me hizo hacer un par de ejercicios, que realmente me relajaron, a más de eso le conté que no estaba pudiendo dormir, pero no quiso enviarme nada de medicación para que logre hacerlo.

Agendó mi cita para dentro de un mes, y dijo que siguiera así, como estaba, leyendo, cocinando y que saliera a divertirme, eso lo dejó como tarea.

Era obvio que mi maquillaje se había corrido, pero no me sentí presionada en arreglarlo y saber que fuera me esperaba Tae, salí un poco mejor de lo que esperaba, para después ir a comer con mi amigo y regresar a casa a hacer tareas y descansar.

No sé por qué después de haberme despedido de Tae sentía algo más, un nerviosismo que no logré descifrarlo en ese momento; tenía un aroma peculiar el cual se había quedado impregnando en mi memoria, escapó un suspiro de mis labios y... no podía ser lo que estaba imaginando, traté de dejarlo de lado y céntrame en lo que tenía hacer, no me lo iba a permitir, al menos no por ahora.

Aún tengo miedo.

Tom.

Después de la maravillosa cena que habíamos tenido, porque para mí así lo había sido, Harvey volvió a casa con Mary y Seb, dijeron que ambos estaban juntos y era más que evidente que sería así, como mira Seb a Mary con ojos de amor me recordaba al brillo en los ojos de mi gatita y aun duele, demasiado como para no recordar su voz cada día, pese a que ha pasado tiempo el aroma de su ser seguía aquí, y... no llorar es imposible para mí.

Caet quiso venir conmigo, pero me negué, mis vacaciones estaban por terminar y quiero estar mejor, al menos tratar de estar.

Se que llorar no soluciona las cosas, pero al menos no me ahogo con todo el dolor que sigo sintiendo, extraño sus cálidos abrazos, extraño sus dulces besos, extraño el sabor de su comida y el sonido de voz al llegar a casa, no supe valorarlo todo. 





Tae anda rondando niñas e Isa anda sintiendo algo. 🥺

Pero mi niña Isa va mejorando, es lo que importa. 🥳

Es imposible que Tom olvide a Isa. 🥺

Espero les haya gustado el capítulo de hoy. 💖

Muchísimas gracias por leer, comentar y votar. 💗

Las amo muchísimo. 🥂❤️

Solutions with Champagne (Tom Hiddleston)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora