Capítulo 19. No estoy lista.

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Isabella

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Isabella.

Pasamos alrededor de dos meses viviendo en un hotel con Tae en Londres, cada día nuestra relación se volví más sólida, nuestra llegada fue la más esperada por parte de mi familia.

Para papá Tae ha sido como un hijo más, de verdad lo aprecia, Danny igual, el abuelo ni se diga, Maribel, ha dicho que es perfecto para mí, pero Aurora, ella sabe a quién realmente amo. Y no niego que a Tae no lo amé, si lo amo, y si fuesen otras las circunstancias dirían que lo amo con todo el corazón, pero sería estar mintiendo.

Para nuestra suerte conseguimos trabajo, no en el mismo lugar, Tae cocinaría para una clínica, realmente pagan bien en esos lugares, y yo conseguí empleo en un restaurante de alta alcurnia, créanme, me daban muchísimos nervios trabajar ahí, no porque no sepa cuales son mis capacidades, solo que el jefe de cocina era realmente tajante.

Volví a ver Bryant, vaya cambio en él, era todo lo contrario a lo que yo había conocido, había mejorado para bien, está por casarse con Ariana, según lo que me contó la conoció en una carrera de motos, si, aún tiene su moto. Lo veía feliz, su abuelita lo estaba y para él si seguía siendo su mundo.

Ali y Bill siguen juntos, las cosas no están yendo bien para ellos, a Bill se le acabó el amor, o bueno, eso es lo que dice mi amiga.

Mi vida estaba siendo perfectamente perfecta, pero no estaba lista.

Noviembre.

Tom.

Estaba pensando seriamente que hacer, vender la casa era liberarme de Isa y dejarla por completo.

Mi relación con Caet ha ido bien, no tengo quejas, nos llevamos demasiado bien y aunque los problemas no han estado ausentes, hemos aprendido a sobrellevarlos.

Quién lo diría que esa noche de entre risas con mi hijo y Caet, después de dejar a mi pequeño en casa, fui a dejar a Caet, y la pregunta solo salió de mi boca, no quería estar solo, de eso estaba seguro, y en realidad una de las pocas mujeres que se ha quedado en mi vida desde el segundo uno ha sido ella.

Si, dijo cosas que no debió haber dicho, o bueno en ese momento me dolieron, pero ya habían sido cosas del pasado.

Ahora llevamos un año juntos y ha resultado para bien, mientras tanto Elina, está a punto de casarse con Enrique, un hombre con un gran talento, inteligente y... es lo que Eli necesitaba.

En cuento a mi mamá y su mejor amiga Sophia, Mary me dijo que sería mejor poner una orden de alejamiento, y sin duda fue lo mejor, ellas dos eran mi mayor tormento.

Sabía que debía avanzar, mi vida debía hacerlo, y lo estaba logrando, pero simplemente Isa sigue ahí.

Tina, tuvo un hijo con uno de los mejores empresarios de toda Inglaterra, así lo anunciaban los periódicos, Emilio Brown, decía que tenía una familia sólida, mentían, Tina aun llama a saber si regresaremos y aun me jura amor eterno, he bloqueado sus llamadas, pero de una u otra manera siguen llamando.

Mi vida estaba siendo perfectamente perfecta, pero no estaba listo.

Teníamos una cena especial, toda la familia iría, sería el momento, y todo cambiaría.

Isabella.

Ese día había una reservación importante en el hotel, o bueno, eso dijo el jefe, me quedaría hasta tarde, de eso no había duda, llamé a Tae y le dije que cenara sin mí, puesto que no podía llegar, sin embargo, dijo que esperaría a mi llegada, este hombre era así, siempre me espera.

Aun cuando no es del todo mi responsabilidad, me puse a arreglar el lugar, de manera que esté impecable, era una familia de seis personas, la reservación a nombre de una tal Georgeta Orlovschi, todo estaba en orden. Llegarían a las ocho de la noche, así que mientras tanto la comida seguía siendo preparada y servida a los comensales. 

- ¡Hey tú! -llamó mi atención el jefe -necesito que hagas algo tan creativo que te aclamen por eso -respondió.

El jefe era estricto, pero siempre trataba de explotar mis capacidades a un nivel extraordinario.

-Por supuesto jefe -respondí y me puse manos a la obra, tenía dos horas para pensar, planear, plasmar, cocinar, emplatar y servir.

Así fue, preparé todo el menú, de entrada, brochetas de camarón a la flor de Jamaica, crema de calabaza, simple, pero con mi toque especial, para el plato fuerte, carne de cerdo dorada con romero, patatas finamente cortadas a las finas hiervas, ensalada de col morada y piña, amaba esa ensalada, además de tener esferificaciones de salsa agridulce, una explosión de sabores, de eso no había duda alguna. Di ordenes y mis compañeras de trabajo se apresuraron a hacerlo.

- ¿Ya planeaste el postre? -preguntó Richard, mi jefe

- ¿El postre? -pregunté sin entender.

-Si, también hazlo.

Y se me agotaba el tiempo, me puse a hacer cálculos y no tardaba nada en hacer una tarta de cerezas, así que pedí ayuda Harol se encargó de parte del plato fuerte y yo me puse manos a la obra con el postre.

Escuché a Richard gritar que la mesa especial había llegado, alce mi mirada al reloj de la pared y en efecto, eran puntuales.

Cameron se apresuró a servir el champagne Roederer Cristal Brut Rosé 2013, uno de los mejores que se servía aquí, o bueno, de entre todas las marcas y en cuanto a su sabor era exquisito, también pidieron una bebida sin alcohol, así que terminé de preparar un Smoothie de piña, mango y agua de coco.

Y la velocidad en la cocina se sentía, Ángel se encargó de las entradas, Romina de la sopa y yo del plato fuerte, al entender la prisa con la que los comensales comían nos tranquilizamos, así que el resto fue pan comido.

Serví el postre y me dejé caer en una silla.

Escuché un par de aplausos fuera, pero era más mi cansancio que el simple hecho de prestar atención.

-Le dijo que si -habló Ángel corriendo hacia mí.

- ¿De que hablan? -pregunté sin entender.

-Ay mujer -soltó una carcajada Romina -la mesa que atendimos era para un compromiso de matrimonio.

-Se imaginan que hubiese dicho que no -reí.

-Sería imposible, el tipo que le pidió matrimonio está guapísimo -respondió Ángel.

-Isabella, ven -ordeno el jefe desde la puerta de la cocina.

Y no niego me puse muy nerviosa.

- ¿Necesita algo? -pregunté.

-La mesa en la que había reservación desea felicitar al chef -respondió -tú.

- ¿De verdad? -hablé sin entender.

-Isa, no los hagamos esperar.

Nerviosa salí junto a Rich y caminé directo a la mesa.

Casi me desplomo al ver de quien se trataba. 




Ah caray andamos dando pasos agigantados.😢

¿Quién será la que dijo que sí? 🤔

Hay muchas cosas así que opinen aquí. 👉🏼

Espero les haya gustado el capítulo de hoy. 💖

Muchas gracias por leer, comentar y votar. 💗

Las amo infinitamente. 🥂❤️

Solutions with Champagne (Tom Hiddleston)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora