Te pertenezco [Libro Dos]

Capítulo 9

La noche se hizo presente y todos llegaron al lugar donde sería la fiesta que Felix había mencionado, un hotel muy lujoso para ser exactos, muchos hombres llegaban con mujeres y sus guardaespaldas a un lado, mientras que Felix y Changbin con todos sus hombres detrás, eso era una imagen muy placentera.

Los recibieron y les dieron una mesa, mientras que todos los hombres que iban con ellos se dispersaron por todo el lugar  para cuidar. Jeongin también estaba ahí, pero el no era el objetivo por ahora.

—Estas muy callado, ¿Sucedió algo con Hyunjin? Me enteré que ayer hablaron.

—Corto lazos conmigo, dijo que aunque aún me ama, no va a perdonarme.

—Ya veo, esta en todo su derecho. —comentó haciendo que Felix frunciera el ceño.

—¿Estás conmigo o contra mí?

—Estoy de su lado, piénsalo un momento, huyo de ti porque estaba dolido por los golpes, se supone que eso no tenía que pasar, ¿Sabes cuántas veces lo console?

—Ustedes creen que lo saben todo, Hyunjin no fue el único que sufrió en todo esto.

—Pero sufrió más, Felix, pienso que deberías dejarlo también si realmente no lo quieres. Voy por bebidas enseguida vuelvo. —El mayor se levantó de su asiento y Hyunjin fue detrás de él hasta la barra, donde se estaban preparando las bebidas.

—¿Quiere que le prepare una mi señor? —Hyunjin se ofreció con una sonrisa.

—Adelante, tus bebidas saben deliciosas.

Hyunjin pidió permiso para poder preparar la bebida y aunque se lo dieron lo estaban vigilando, también tenía los ojos de Jeongin y Felix sobre el.

Cuando terminó de prepararla, la sirvió y espero la reacción de Changbin.

—Como siempre lo mejor de lo mejor.

Algunas invitadas se acercaron a la barra ya que también querían probar lo que el de cabello negro había preparado, Felix fruncio el ceño de observar y su sangre comenzaba a hervir de ver como algunas se le insinuaban.

Jeongin se hallaba en la misma situación, pero frente a el paso Seungmin hacia el baño por lo que decidió seguirlo.

Felix se acercó hasta las mujeres las cuales se hicieron a un lado en cuanto lo vieron, incluso descorcentando a Hyunjin.

—Changbin, ¿Podría tomar prestado a tu guardaespaldas?

—Si no es nada malo, adelante.

Felix lo tomó de la mano para llevárselo y entraron al elevador para llegar hasta los pisos más altos que es donde estaban las habitaciones, entraron a una y ahí soltó al mayor.

—¿Quiere explicarme porque me trajo hasta aquí?

—Porque haces mucho disturbio abajo, estamos trabajando, no es el momento para estar coqueteando. —Se excusó el mafioso mientras se calmaba.

—¿Es eso? Tal vez a pesar de todo sigue siendo un hombre celoso de sus cosas, pero ya le dije que yo ya no soy suyo.

—No hizo falta que me lo dijeras, tu maldito tatuaje de la mano y del cuello fue suficiente, pero no lo aceptó, tu cortaste lazos conmigo no yo contigo. —Se acercó hasta Hyunjin, aunque su altura era diferente, sus ojos podían reflejar que ambos estaban enojados con el otro. Su enfrentamiento era algo peligroso para ambos.

—¿Aunque llegue a odiarlo?

—Sino lo hiciste en este tiempo, ¿Por qué deberías hacerlo ahora? Aún me amas y eso no va a cambiar en mucho tiempo, ¿No lo dijiste?