• 𝙅𝙪𝙨𝙩 𝙢𝙚 𝙖𝙣𝙙 𝙮𝙤𝙪... ● // Tom kaulitz

▪︎ where is ?? ▪︎

4 meses desde que Tom, seguía en coma, nunca pude visitarlo, ni siquiera mirara a través del cristal. Seguía en casa, con mamá y Peter, mientras buscaba salir del país, y formar mi nueva vida... sin mi chico.

Leí cada carta, todos los días frente al lago, yo seguía igual, solo que rota por dentro.
Visitaba a los chicos, al mirar a Bill a los ojos, me recordó a Tom, tenían esos mismos ojos, solo que Tom, Tom tenía su mirada diferente a la de Bill aún siendo gemelos.

Conseguí empleo en una tienda de instrumentos musicales, el trabajo era temporal, hasta que juntara y saliera del país.

Siendo sincera, lloraba todas las noches, quiero decir, sin parar de llorar, siempre esperaba que ese chico abrieron mi ventana, cosa que nunca pasó...

Jake se había mudado, nunca tuve la oportunidad de hablar con él seriamente, sobre qué lo pasó. Jane, estaba conmigo trabajando, decidió ir conmigo, mudarnps juntas. Aún no sabía en donde, pero lo haríamos.

Significaba que tendría que dejar a Tom, en ese sucio hospital, durmiendo... se me revolvía el estomago de pensar cosas terribles, como el día que lo sostuve en mis brazos, sin darme respuesta alguna. Traté de llorar, pero mis lágrimas se habían gastado en el, absolutamente todas....

Cada día, tuve puesto el collar de plumilla, siempre lo frotaba cuando lo extrañaba, me perdía en mis pensamientos, mi madre se preocupaba por mi, no comía nada, simplemente llevé mi vida como basura, pero trataba de mantenerme firme.

Afortunadamente, los días en el doctor, y los medicamentos sirvieron de algo, sane, sane poco, aún tenía moretones, pero eso era lo de menos.

Tom, yo sané por ti y tu enfermaste por mi...

Hubo una noche donde no pude dormir, salí a caminar, era la noche más fría y oscura, que había visto, por un momento imagine, que Tom me tomaba de la mano, entrelazando su mano con la mía y caminabamos, mientras el hacia chistes sin sentido, por lo que me reía, no de los chistes, si no de como se le ocurria tanta estupidez.

Sacudí mi cabeza, ignorando eso, por lo que me deprimí, mis ojos estaban caídos mirando el piso. Resople y seguí caminando hacia ninguna dirección.

De pronto. me detuve, vi a un gato, color gris, bebé, hecho bolita. Lo tomé entre mis brazos, lo miré y depsues lo acarice, no lo podía dejar solo ahí. Era terrible una vida para el, sin nadie que lo cuide. Lo envolví en mi sudadera, era la misma sudadera de Tom, nunca me la quitaba, quería servirlo cerca.

Llegue a casa, lo metí a mi cama, acurrucadose en mi cuello, ah... que lindo gatito, ojalá mi madre me deje quedármelo.

Parecía infante, escondiendo a un gato en mi habitación, era ridículo, pero realmente me lo quería quedar...

Al siguiente día, desperté, el gato no estaba a lado mío, escuché un grito desde abajo sonar.

Salí corriendo de mi habitación y bajé lo más rápido posible...

-Ma..! Que pasa??- dije agitada

-De donde salió este gato?!!- pregunto molesta.

-Ah... yo.... yo lo traje a casa, vamos... es un bebé, no lo pude dejar afuera, en la oscuridad.

-Emily, te harás cargo o... o te sales de la casa y dejo al gato.

-Si, lo prometo!!!

Me subi a vestir, tenía que ir a trabajar junto con Jane, ella esperaba afuera en su auto mientras yo me apresuraba para entrar ahí.

-Por fin- dijo con pesadez

-Lo siento, me quedé charlando con mamá.

-De acuerdo...