▪︎ shining again ▪︎

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Desperté adolorida de la espalda, el colchón no era lo suficientemente cómodo, me levanté a desayunar, para mi suerte Jane estaba con unas galletas en sus piernas y leche en la mano.

–Hola- dije frotando mi ojo.

–Holaa, estoy desayunando.

–Uff, iré a buscar empleo a cualquier lugar, no podemos vivir sin dinero en este país.- dije mirando una taza de café.

–Em, no hay prisa, pero si asi lo deseas, esta bien.

–Primero iré yo, ya después tu.

Me vestí, el clima era templado pero con mucho viento, me puse la sudadera de Tom y salí a buscar empleo, ajuste mi bolso al hombro y caminé a la salida. No fue en ese entonces que Kyle estaba parado en un poste, como si fuera esperar mi salida.

–Hola, tu- dije dirigiéndome a el.

–Hey!! Aquí vives?- pregunto confuso.

–Sip, ayer llegue aquí. ¿Y tu...?

–Am no, yo espero a mi novia.- cuando dijo novia se me seco la garganta, ayer me trataba de conquistar, incluso me dio un papel, uh...

–Ouh... novia, am es, es genial.

–Sip, ella vive aquí y vengo por ella para salir a desayunar.

–De acuerdo-  me molesto que al principio no me dijera que tenia novia, digo, A que el me tratara de pretender y de un día para el otro, espere a su novia en la entrada. ¿Que clase de italianos son?

–Entonces.... a donde vas?

–Como si te importara-
Hablé involuntariamente, por lo que tapé mi boca rápidamente y me abofetee mentalmente.

–Eres ruda, eh. Amm, irás a la dirección.

–No lo se, bueno, tengo prisa.- me aleje de ahí rápidamente, este chico era un idiota.

Que molesto.

Busque varias tiendas y no encontré uno, por lo que me rendí. Había caminado varias horas. Y mies pies dolían.

Me dirigí al muelle, quería relajarme un poco. Me senté, puse mis manos a los costados, como si me aferrarse a las rocas que habían al rededor, el cielo estaba nublado, la brisa del mar chocaba y el viento alborotana mis cabellos.

En eso, sentí una presencia atrás mío, por lo que voltee despacio. Al girar mi cuello, mi corazón se detuvo por un momento y mi cabeza se quedó en blanco, era el... mi chico Tom.

Comencé a llorar, me levanté de las duras rocas y corrí hacia el. Esto era inimaginable, de tanto estar envuelta en mis pensamientos, creí que esto solo era una pequeña fantasía deseada.

El tomó mis brazos y acurrucó su cuello, dentro del mío, ese aroma de él me volvía loca, era tan encantador volverlo a percibir.

Me separé rápidamente de el, quería estra segura de que no fuera un sueño.

–T-tom...- dije aun en shock.

–Si, linda, ya estoy aquí...-  me besó suavemente, mientras tocaba mi cabello por detras.

En eso, un tren se escucho pasar, con un rechinido que me hizo volver a la triste realidad.

Estaba parada en una estación de tren, tratando de conseguir empleo.

–Mierda!!!- maldije en voz baja, debo de dejar de tener esos sueños... ya no más.

Estaba harta de tener que vivir con sueños.

• 𝙅𝙪𝙨𝙩 𝙢𝙚 𝙖𝙣𝙙 𝙮𝙤𝙪... ● // Tom kaulitz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora