Destinos cruzados

Capitulo 3

No estaba segura de ir, pero quien me manda a decir que si, y más sin antes haber escuchado de lo que hablaba, la fiesta es de su amiga Val, Valeria Ramírez, latina, todos estamos de acuerdo en que las fiestas latinas son lo mejor, digo de vez en cuando me gusta escuchar canciones de cantantes urbanos o reguetoneros latinos, digo mi segundo apellido es Gómez, pero no me encuentro tan bien como para ir a una de esas fiestas.

Y sonó el celular que estaba tirado encima de la cama, lo tomé y vi el mensaje.

Princesita Sophia: ¿vas a venir?

Ever: estoy de camino.

Los siguiente fue colocarme una sudadera con cremallera abierta y salir rápido.

Cuando llegué la música estaba a un nivel medio, algunas personas estaban sentadas en el césped mientras hablaban con otras personas, unos miraban las estrellas, y otros simplemente se dejaban llevar por la música y el alcohol, fue entonces cuando la vi, llevaba puesto un vestido gris ajustado a su cuerpo, el cabello suelto y unos mechones por su cara, y tacones blancos no tan altos, se veía increíble.

- Hola- dije parándome junto a ella.

- ¡Ay!, hasta que llegas- se volteo para abrazarme.

- Se me hizo un poco tarde- sonreí mirando a los que bailaban.

- La fiesta no empieza hasta que yo llegue- grito alguien mientras entraba con una botella de vodka en la mano derecha.

- Me cago en la puta- susurro Val parándose junto a mí.

- ¿Qué pasa? - pregunto la rubia.

- Que no se quien idiota lo invito, arruino mi cumpleaños diecisiete, viene a arruinar este- apretó el baso plástico con su mano.

- ¿Pero quién es? – pregunte.

- London Miller, el hijo de puta que me rompió el corazón y me humillo frente a todos en el insti, maldito desgraciado- estaba enfadada, sus mejillas se colocaron más rojas y no era por el trago, de eso me aseguro.

- Cálmate seguro alguno de sus amigos está aquí, o alguien subió algo, y ya sabes, llego aquí sin ser invitado- Sophia paso sus brazos por encima de sus hombros.

No me daba buenas vibras London, pero ya estaba aquí que se le puede hacer, aunque la cara de idiota no se la quita nadie.

- Ever?, que haces aquí- dijo una persona atrás de mi.

- Ellie, pues es una fiesta y me invitaron- sonreí y me abrazo.

- Que gusto verte, de verdad- dije separándome.

- Si después de ese día no hemos vuelto a hablar, cuéntame de que va tu vida- Ellie era una antigua amiga del insti, salió hace un año.

- Bueno de momento las clases van bien, ya mi amistad con Dean no es igual, y Emmet es un idiota, pero un idiota que me cae fenomenal, mis padre está de tour por algún país el cual no se bien, porque la última vez que hable con el no me dijo nada, y bueno estoy practicando deportes, y eso- sonreí mientras caminábamos a la mesa de tragos.

- Pues bastantes cosas pasaron he- me dio un golpecito en el hombro.

- ¿Y tú que tal todo? – le pregunte pasándole su vaso.

- Pues la universidad es increíble, encontré pareja, se llama Gail, y estudia comercio internacional, nos entendemos a la perfección, mis estudios van muy bien, aprobé todo y pues ahora estoy de vacaciones esperando el próximo semestre- tomo un poco de cerveza.