Indirectas. Cache

La niña fresa.

DC.

Llevamos fácil una hora discutiendo, una puta hora en donde no sale de "Esto es un secuestro", ya le expliqué que no la conozco y que no se cómo llegó a mi camioneta.

- Ya!- levanté poco la voz - cuántas veces te tenemos que explicar que no te secuestramos- me acerque a ella -No creerás que me estoy creyendo que tú eres la víctima aquí- me miró confundida - Tu eres la que quiere robar mi medicina, niña fresa drogadicta- la mire triunfante, al fin se quedó callada...  Pero fue por qué vómito.

Me vomito a mi para ser precisos.

- Ay perdón, no me siento muy bien- fui por la botella de agua que tenía en el carro y se la di.

Resignada a viajar con vomito de otra persona, me senté a esperar a que cargarán el burro para empezar lo más pronto el viaje y dejar a la niña fresa aún lado.

- Perdoname no fue con la intención- me miró apenada.

- Al menos ya resolviste la incógnita- se sentó al lado mío - bebiste demasiado, tanto que no te diste cuenta que caíste en la camioneta-

- Cómo sabes que tome- agarro su tacón como instinto de defensa.

- Niña traes una cruda bárbara- negó muchas veces.

- No, no puede ser, yo nunca...- y abrió los ojos, creo que ya cayó en cuenta - Mi boda- dijo alterada.

- Uuh- dije divertida -Si que tienes un grave problema-

- Tenemos un grave problema- me corrigió - Tu me trajiste hasta acá, tú me regresas- y me solté a reír.

- Que gran chiste jajajaja- me miró muy seria -Espera es en serio?- asintió- sabes el camino que hay que recorrer de regreso?¿No sabes en donde estas cierto?- y como era de esperarse pues no, no sabía.

- Haber, estamos a 3 horas de Miami  que creó que es de dónde vienes tu- esperaba equivocarme y que me dijera que venía de más cerca pero cerró los ojos.

- ¿Qué hora es?- le mostré mi celular donde marcaban 12:35 PM - Me tienes que llevar de regreso- Si nos vamos ahorita si alcanzo a llegar- y se dirigió a la camioneta.

- Si... No lo creo- me miró sorprendida- Oye no es mi problema, de aquí yo agarro camino a mi pueblo y el domingo me regreso a Miami- me encogí de hombros.

- Por favor ayudame tengo que llegar a mi boda- suspiré.

- Yo no puedo hacer nada hoy, ya te dije si quieres ir a mi pueblo y hasta el domingo regresar puedes hacerlo- camine al burro y lo tome de la correa - Si no quieres esperar hasta el domingo vete con Don Genaro y el Alcon ellos se regresan hoy mismo- señale a dos señores que llegan a intimidar.

- Me imagino porque le dicen Alcon - le dijo temeraria al señor que tiene un ojo de vidrio. El señor bufo cómo toro y ella corrió a mi.

- Tranquilo Alcón, tendrás todo el viaje a Miami para eso- sonrió divertido.

- Estás loca si piensas que me voy a ir con ellos- los dos la miraron ofendidos.

- Entonces vete caminando- y justo se soltó la lluvia lo que me faltaba.

- Nosotros ya nos vamos señorita Daniela - mientras les pagaba por ayudarme a cargar, la Niña fresa no se soltó ni un poco de mi brazo - Entonces no te vas con ellos - pregunté por última vez.