Capítulo Diez

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Shin no podía dormir, tenia pesadillas que le dificultaban conciliar el sueño. En una de ellas se encontraba caminando en un oscuridad absoluta, una densa oscuridad que no le permitía ver a su alrededor .

—¿Dónde estoy ?–Se preguntó Shin caminando sin rumbo por el lugar donde se encontraba, sintió algo húmedo en sus pies y cuando vio que era se sintió aterrado–Sa...san...SANGRE!!!!!–grito aterrado y luego escucho una voz.

“No te asustes”

—¿Quién eres?–Shin estaba confundido, ¿En donde estaba?¿Quién era el que le hablaba?.

Todo estará bien

Mi señor!!! Despierta!!!

Esa es la voz de Merak....–Se dijo Shin mirando a los lados pero no veía nada y escuchó a la misma voz que le habló en el inicio.

Despierta

Mi señor despierta!!!!

Shin despertó agitado, y noto que Merak lo miraba preocupado y triste. ¿Qué estaba sucediendo? ¿Quién era esa voz ?.

—Mi señor por fin despierta.

—¿Qué paso?, Merak...que sucedió y la voz donde esta.

—Voz???–Preguntó Merak sin entender.

—No es nada, Shinoju mi hijo donde esta.

—Tranquilo, Shinoju esta en la mesa tomando té. Vine a despertarte y no parabas de temblar y sudar y me preocupe mucho .

—Lo siento. De verdad lo siento–Se disculpo Shin abrazando a Merak–Merak por favor nunca me dejes.

Merak no entendía que pasaba, no entendía por que Shin se disculpaba, pero solo correspondió al abrazo.

—No lo haré mi señor–Dijo–No me iré hasta que usted este a salvo–Pensó para si mismo.

—Gracias... Merak muchas gracias–Abrazó con fuerza al mayor.

—Madre...–Se escucho una voz en la puerta y Shin vio que era su hijo.

—Si Shinoju dime–Respondió Shin separándose del abrazo y se acercó a su hijo.

—Él es mi padre–Dijo señalando a Merak.

—Shinoju....–Shin no sabia que decir y Merak apoyo una mano en su hombro.

—Yo no soy tu papá–Dijo Merak–Pero si te agrada la idea, puedo ser esa figura para ti.

—Me haría muy feliz–Sonrió Shinoju y abrazo a Merak–¿Puedo llamarte padre?.

—Si Shinoju puedes llamarme padre–Sonrió gentilmente Merak–Vallamos al árbol a tomar te  mientras Shin termine de arreglarse.

—Si padre.

Shin se quedo en la habitación , tenia que pensar en muchas cosas ¿Cómo explicaría a su hijo ? ¿Su hijo lo aceptará?. Se arregló y salio de la habitación rumbo al árbol encontrándose con los dos Zeno-zama, pero no estaba Daishinkan acompañándolos como de costumbre. Eso fue un alivio para Shin pero vio a un ser que llamo su atención.

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