"Tengo más calor que un pollo dando vueltas en el asador" pensó Monica mientras se miraba en el espejo del baño.
Había huido de sus amigas en aquel antro de mierda solo para retocarse un poco el maquillaje y acomodarse el cabello. Y también para aguantarse las ganas de llorar sin que sus amigas lo notarán.
Estaba cansada de el idiota de su novio y sus estúpidos celos. Por culpa de él no podía disfrutar esa noche de fiesta, porque el muy idiota le había enviado mensajes molesto diciéndole que odiaba que ella saliera de fiesta. Que de seguro lo engañaria con el primer tipo que le hablará bonito, que se había puesto ese vestido tan corto porque estaba tratando de conquistar a alguien más.
"Enfermo de mierda, lo odio porque logra afectarme". Ella no lograba entenderlo, pero el si era capaz de hacerla sentir mal con esas palabras, y sobre todo la hacían sentir culpable. La hacían querer abandonar la fiesta y encerrarse en casa con tal de mantenerlo a él contento. Con tal de hacerlo feliz.
Estaba enamorada al principio, se había enamorado tanto de él que incluso había comenzado a alejarse de sus amigas, pero hace mucho que las cosas no eran igual, ella había intentado dejarlo tantas veces pero el siempre le lloraba y le rogaba haciendola sentir mal.
Ya no estaba enamorada, simplemente estaba amarrada a alguien que no era capaz de soltar.
Y ese día, justo ese día que por fin sus amigas lograron convencerla de salir y ahí se estaba acordando lo divertido que solía ser estar con ellas el tenía que hacer su escena de "hombre herido y engañado" para que ella quisiera salir corriendo de ahí.
Le dolía el pecho, quería irse, ella realmente quería irse y abandonar todo, no por el, si no por la impotenciade querer librarse de el y no poder hacerlo. Así que lo decidió, le envío un mensaje pidiéndole perdón y diciéndole que ya iba a casa y salió del baño dispuesta a marcharse.
__ ¡Hey, Moni! ¿A dónde vas? __ Viviana, una de sus amigas fue quien la vio cuando agarraba su bolso y se dirigía hacia la puerta, así que no dudo en alcanzarla y detenerla.
__ Me voy a casa. Ya me aburrí.
__ ¿Qué? Si estábamos tan contentas bailando entre todas.
__ Tengo que irme, y es tarde.
__ No mames, Monica, son la una apenas.
__ La una para mi es tarde, tenemos uni mañana.
__ Si, pendeja, pero estudiamos de tarde. __ Monica se quedó sin argumentos, pero no importaba tenía que salir de ahí como sea. Cuando Viviana se dio cuenta de los ojos rojos de su amiga y el como parecía desesperada por irse entendió que algo estaba pasando, así que suspiro imaginándose el motivo. __ Bien, vamos a despedirte de las chicas y que Galilea te lleve a casa.
__ No quiero molestar a Gali con eso.
__ Vamos, wey. __ Viviana ignoró los reclamos de Monica y simplemente la arrastró en contra de su voluntad hacia donde se encontraban todo su grupo de amigas bailando entre ellas. __ ¡Chicas, Monica ya se va!
__ ¿Por qué, wey? Estamos bien agusto __ Galilea fue la primera en quejarse.
__ Seguro es otra vez ese pendejo __ Briana acertó con su comentario haciendo a Monica sentirse avergonzada. Ella no quería admitir frente a sus amigas lo que pasaba, realmente le daba mucha vergüenza aceptar que si se iba a causa de él. En el fondo ella sabía que dejarse manipular de esa manera por su novio estaba mal. Pero jamás dejaría que sus amigas tuvieran mala imagen de él.
__ No, Leonardo ya está dormido. Es solo que ya es tarde chicas, tengo que irme. __ mintió, ella podía sentir su celular en su bolso, vibrando seguramente con llamadas de él.
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La novia de mi novio.
Short StoryMonica es novia de Leonardo. Dana es novia de Leonardo. Ninguna sabe de la existencia de la otra. O al menos no lo hacían hasta que chocaron en aquel bar. Monica estuvo con Dana, Dana la acepto. Monica no tenía remordimientos. Dana no podía con...