La novia de mi novio.

Capítulo 16. Feliz navidad

La farsa más grande de navidad.

Justo así es como se sentía.

Eran vacaciones, ella debía estar con su familia, pero muy contrario a eso, estaba metida en casa de los padres de Leonardo, ayudando con la cena mientras ese solo se rascaba la entrepierna mirando la televisión.

__ No, así no, Monica, cortes finos te dije, esto está demasiado grueso.

"Grueso el golpe que quiero meterte"

Monica solo rodó los ojos intentando corregir los cortes, ¿por qué ella tenía que estar en friega haciendo la cena mientras Leonardo y su padre estaban ahí sentadotes?

__ ¿Así está bien?

__ Pues ni modo __ La madre de Leonardo se lleva los cortes de carnes y hace quien sabe qué mientras Monica permanece de pie en el mismo sitio __ no te quedes mirando, haz algo, corta los tomates.

__ ¿Cómo lo hago? __ su suegra niega con la cabeza molesta.

Monica se encoge de hombros.

"Hay muchas maneras de cortar el tomate, no es mi culpa que usted no sepa eso, anciana"

__ ¿Tu madre no te enseñó a cocinar?

__ Mi madre no cocina, eso lo hace papá.

__ Estas familias modernas, pero no te preocupes, yo te ayudaré a que seas la esposa perfecta para mi hijo.

Que asco. Ella casada con ese engendro, ni dios lo mande.

Y si dios lo manda ella va y vende su alma al diablo con tal de no tener que casarse con el nunca.

__ Leonardo puede hacer sus propias cosas.

__ Es tu hombre, tu deber es atenderlo, sobre todo ahora que viven juntos. Ya decía yo que noto a mi hijo más delgado, lo estas descuidando, Ica.

__ Monica.

__ Mi amor, suena a changuito, "Ica" esta mejor.

Monica eligió no seguir discutiendo.

Realmente solo quería que esa estúpida cena terminará rápido para por fin poder ir a visitar a sus padres, a ellos sí que los extrañaba y necesitaba tanto.

Ya estaban en vacaciones, Dana llevaba alrededor de tres meses encerrada en aquel lugar, y aunque Monica no tenía ni idea de cuánto tiempo estaría encerrada, sus esperanzas de volver a verla la mantenían con energía.

__ Pon esto en el horno, por favor.

La mujer le entregó a Monica una gran charola, de hecho, pesaba bastante, tanto que Monica soltó un quejido y costó tanto caminar hacia el horno, sobre todo le costó abrirlo, eso sí fue realmente un problema. Pero hasta ahí todo bien, una vez que la charola estuvo dentro Monica intento sacar sus manos, por accidente su piel tuvo contacto con la caliente parrilla metálica de abajo.

__ ¡Me lleva la...! ¡AGHH! __ ella se quejó del dolor.

__ Ay, hija __ la mujer se aproximó a ella con un pedazo de tomate que le colocó sobre la quemadura __ esto es lo malo de que a las mujeres no les enseñen desde pequeñas lo que les corresponde, se convierten en muchachitas inútiles.

__ Cállese, solo Cállese __ Monica dijo entre dientes, sin poder hablar del todo bien y sin que fuera totalmente entendible, estaba realmente sufriendo el ardor y dolor de su piel.

__ Listo, ya paso, aguantese, las mujeres no paramos con nada __ la madre de Leonardo dejó un par de palmadas en la espalda de Monica antes de continuar con lo demás que era necesario para la cena.