La novia de mi novio.

Capítulo 3. Chica del momento.

El partido había terminado.

Ese día Leonardo y su equipo lograron ganar 2-1, el estaba ahí con sus amigos mientras celebraban y se refrescaban.

Leonardo estaba contento por la victoria, pero frustrado al mismo tiempo. Ese día la que lo estaba acompañando en las gradas era Dana, que no paro de gritarle y echarle porras desde su lugar.

Pero Leonardo hubiese preferido tener ahí a Monica, para demostrarle que si podía ganar partidos, que no era un mediocre como ella lo había llamado la última vez.

__ Tu chica no ha dejado de tirarte flores por el triunfo __ uno de sus compañeros de equipo le dijo.

Era cierto, Dana seguía en su lugar celebrando su victoria, gritando para el palabras de aliento.

Leonardo solo rodó los ojos y bebió de su agua.

__ Déjala, ahora voy.

__ ¿Por qué no traes siempre a esta? La otra no parece muy contenta de estar aquí cuando viene.

Leonardo se encogió de hombros.

__ Monica es mi novia, la conocen mis padres y llevo más tiempo con ella. Dana es demasiado empalagosa, siempre quiera estar conmigo, sobre mi, siempre está fastidiandome y enviándome sus ridículos mensajitos. Me aburre demasiado.

El chico frente a él dirigió la mirada hacia la pobre chica en las gradas.

__ Es bastante linda.

__ Sólo por eso sigo con ella __ Leonardo se burló __ en cuanto encuentre alguien mejor la mandó a volar.

__ Yo terminaría con la otra y me quedaría con ésta.

__ No voy a dejar a Monica, ella no me busca, no me fastidia. Es mi relación segura mientras voy por ahí divirtiendome libremente con otras.

Ambos rieron.

Leonardo terminó de despedirse de sus compañeros de equipo y por fin se acercó a Dana quien lo abrazo inmediatamente llena de alegría y emoción.

__ ¡Felicidades, campeón!

Leonardo fingió la sonrisa y correspondió el beso que Dana se acercó a darle.

__ Gane, ¿No crees que merezco un premio?

Dana sonrió.

Monica no cumplia con sus deberes como novia, así que Leonardo tenía que buscar otra manera de cubrir sus necesidades. Y Dana era su solución perfecta.

Dana era totalmente accesible a él, se encargaba de satisfacerlo y se desvivia por hacerlo sentir bien y contento.

Así que la uso, para lo mismo que la usaba siempre. La llevó a casa y se acostó con ella y tan pronto como obtuvo lo que quería inventó la primera excusa tonta para salir huyendo del lugar y correr a buscar a Monica.

Tan pronto como llego a casa de aquella mujer está lo miro con fastidio y lo dejó pasar.

__ ¿Puedo bañarme aquí?

__ ¿No tienes casa? __ Monica se quejó.

El intento acercarse a besarle la mejilla pero ella lo alejo inmediatamente.

__ Estas sudado, Leonardo. Sabes que me da asco cuando estas regresando de jugar.

El rodó los ojos.

Por ese tipo de actitudes es que el tenía que buscar a Dana.

__ Iré a bañarme.

__ Haz lo que quieras.