El día tras que Ji Eun se reincorporara, fue posiblemente uno de los más raros que Ho Seok recordaba.
Él fue probablemente el último en levantarse, tras haberse ido a dormir terriblemente tarde. Podría haber sido por culpa de Chang Kyun, pero en cambio, se había pasado la noche revisando sus diarios, por culpa de algo que había dicho Ji Eun diez días atrás, en la fiesta, y que había olvidado por completo hasta que su cerebro decidió recordárselo: "Las personas de familias importantes tienen tantos nombres porque su porcentaje alto les hace sentir una conexión extraña con todos sus yoes." Ho Seok no le había dado importancia. Le parecía una suma de elitismo y egocentrismo mal dirigido. Él tenía muchos nombres por otra cosa, no tenía que ver con el estatus. Pero esa noche había cruzado su cabeza: y con qué tiene que ver, entonces.
Si las personas de porcentaje alto sentían esa conexión, con qué se suponía que tenía que sentir conexión él, que solo existía en una línea, que era único e irrepetible. Y, aun así, que era tantos al mismo tiempo.
Tal vez eran reales, sus alter egos, yoes posibles que nunca habían tenido la ocasión de existir y habían encontrado una forma de materializarse en él. Le había hecho pensar en qué querrían, en qué significaban para él.
Qué significaba Jessica, que la habían creado otros para él. Aún no había entendido el porqué del nombre, aunque asumía que tenía que ver con el vestido. Le había encargado a Matthew y So Min que le hicieran algo explosivo para Chang Kyun, y había dejado que fuese sorpresa, pero entre la atracción que había generado llevándolo y la forma en que él y Chang Kyun habían jugado a no conocerse, le había obligado a crearle una personalidad y una historia, así que ella era suya también, ahora.
¿Qué era? ¿Su cuarto alter ego femenino? Pronto iba a tener más personalidades femeninas que masculinas. ¿Habría sido una mujer trans, en alguna línea, de haber habido más yoes suyos? ¿O cis? Ho Seok no tenía ni idea de cómo funcionaba eso, ¿qué tanto podía cambiar un solo cromosoma?
No había logrado aclarar sus ideas, por mucho que había leído sus notas, y el cuestionamiento de su propia existencia había acabado con él quedándose dormido cuando el resto del Clan empezaba a despertarse.
Nadie había ido a molestarle, así que había seguido durmiendo.
Debía ser cerca de la hora de comer cuando escuchó, todavía prácticamente dormido, la puerta de su habitación abrirse, y luego el colchón hundirse a su lado.
Gruñó, adormilado todavía pero sonriendo, y sujetó entre sus brazos a la persona a su lado.
Iba a besarle, pero entonces abrió los ojos y se encontró de bruces con la cara de Min Hyuk, demasiado cerca, en vez de con la de Chang Kyun.
Pegó un chillido, y del brinco que dio hacia atrás se cayó de la cama.
—¿¡Qué diablos, Min Hyuk!? ¿Cómo cojones has entrado?
Se levantó a toda prisa del suelo, en ropa interior como estaba. El corazón le latía a toda pastilla, del susto que se había pegado. Y aun así Min Hyuk se quedó en su cama, tumbado de lado y con la cabeza apoyada en su mano, mirándole con una sonrisa como si hubiera sido divertido casi provocarle un ataque al corazón.
—En serio —insistió, una vez se recuperó un poco del susto—. ¿Cómo has entrado? ¿Quién te ha dado el estúpido código? ¿¡Y qué diablos quieres!?
—Ho Seok, usas el mismo código para todo. ¿Qué diablos significa 0629, de todos modos?
—Es el día que me fui de casa. En serio, ¿qué quieres?
—Oh —dijo Min Hyuk, sorprendido—. ¿No tiene que ver con Changkyunie? —Se rio—. Eso no me lo esperaba.
—¡¡Que qué quieres, Dior!!
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Let's start From Zero » Wonkyun. MONSTA X
FantasyViajando línea arriba y línea abajo por el tiempo, Chang Kyun y Ho Seok hacían equilibrios sobre el delgado hilo entre ser uno de los comandos más eficientes del Clan y ser el que más problemas causaba.