Alma de dragón:Hielo.

Capítulo 27: Mi último día en Cair.

Habían pasado casi dos semanas desde el día del incidente de Sam. Mi relación con él había mejorado notablemente aunque no nos dejabamos ver mucho, pero aún habian cosas que se podían mejorar.

Era pronto aún, y teniamos cosas mas importantes en la cabeza.

Las sábanas se me pegaban en el cuerpo haciendome sentir reconfortada. Oía ecos de Ust de fondo.

-Levanta.- me decía difuminandose en la lejanía.

Yo me revolví quejándome porque no me dejaba en paz.

-¡¡Vamos pedazo de oso...LEVANTA!!-escuche gritar a mi amiga Estela, haciéndome volver a la realidad y la cual tiraba de mis sábanas con la ayuda de Leire.

-Ummm...cinco minutos más...-protesté medio dormida.

-¡NO!.-gritó Leire divertida,- hoy es nuestro último día aquí nos lo ha dicho Uriel, osea que hay que aprovecharlo al máximo.-aclaró.

Había llegado el gran día de despedirnos de Arlyl y no se si estaba preparada. Me sentía segura aquí y enfrentame contra los oscuros en la guerra me quedaba demasiado grande.

Tenia miedo. ¿Como sabiamos que era hoy? Se sentía unas malas vibraciones, cada vez mas fuertes a lo largo del día.      

-¿Que hora es?.-pregunté indignada al verme tirada en el suelo cubierto de parquet.

-Son las ocho y media de la mañana.-

-¿Y que día es hoy?-pregunté enderezándome rendida al saber que no podría volverme a dormir.

-Hoy es domingo. ¿Por qué lo preguntas?-

-¡OHHH...domingo!¡Despierta a las ocho de la mañana!-

-Y media de la mañana.-rectificó Estela.-Pero eso da igual. La guerra es mañana, osea que para tí hoy no es domingo.-

-¡Me cago en la leche!.-dije enfadada por el cansancio y que tenia.-¿Qué tenéis pensado hacer?.-pregunté mientras me sentaba frotándome los ojos.

-Habíamos pensado ir con los dragones.- dijo Leire mientras se cruzaba de brazos apoyándose en el armario.

-Bueno...-dije vistiéndome con la primera ropa que había encontrado. Se trataba de unos pantalones de camuflaje y una camiseta de tirantes blanca algo ceñida.- a mi me parece bien. Pero depende de lo que hagamos. ¿Donde esta Graciela?-

-Esa no ha salido de su habitación desde que entró anoche con Lukas.- dijo Estela pícara. Observé como Leire rió por lo bajo.

-Sí,será mejor que los dejemos tranquilos. ¿Y Jake?- pregunte curiosa.

-Está con Sam, esperándonos con los dragones.-dijo Estela.

-Vale...pues venga, vayámonos ya.-le dije saliendo por la puerta. Antes de salir al exterior, las chicas me acompañaron a buscar algo de comida para mí...que para ellas solo era un simple cubito de hielo.

Hoy el cielo estaba bastante despejado, pero aún quedaba alguna que otra nubecilla blanca por ahí.

Rodeamos el castillo para dirigirnos a la extensa pradera que había detrás. Allí encontramos a Lukas, ya montado en Winter, acompañado de Jake ,que le hablaba a su dragón dorado.

-Ya era hora chicas...me estaba quedando dormido hasta que le he empezado ha hablar a Skar.-se quejó Jake.

-Si...lo sentimos, pero es que a Reneé le cuesta levantarse.-dijo Leire.

Noté como me ardían las mejillas de la vergüenza. 

-¡PYROS!.-llamó Estela.

-¿Donde esta Sam?- pregunte a Jake que era el que más cerca se encontraba de mi. El me miró y alzó los hombros sin respuesta.