No sabía que hacer, después de escuchar eso; solo me dio de vueltas la cabeza.
No volveré a ver a mis amigos, y, ¿Hiroshi?¿Qué pasara con él?, supongo que encontrará otra persona con quien estar.- ¿Hijo? ¿Ocurre algo?
- No pa'... No es nada, Este... Puedo salir; bueno no creo que haga falta pedirte permiso.
- Claro. Solo regresa antes de las 3:00pm.
- Está bien, lo prometo.
Sólo salí, comencé a caminar y caminar sin parar.
Pasó una hora y llegué hacia un bar, el chico que estaba afuera me dejó entrar y entré sin importancia; no había mucha gente sólo el que vendía, y otra poca gente, me extrañaba que no hubiera gatitas.
- ¿Qué es lo que quieres pequeño? -Dijo una voz seca.
- Sólo quiero una bebida no importa si es fuerte...
-Un chico como tú no debería estar por estos lugares.
¿Acaso pedí su opinión?
No dije nada y finalicé la conversación con esa persona. Volví a recordar lo que pasó en el cine, cuando encontré a Shizuke.Después el tipo me dio la bebida y la tomé de un solo trago. A decir verdad raspó un poco después de haberla ingerido, pero es no me importó y pedí otra sin dudar.
Al lado había una persona que solo se me quedaba viendo; yo no quería ver a la persona, al parecer era un lobo.
Tenía una cara casi como a la de Hiro, solo que este tenía una raya roja entre su melena, ojos amarillos como los míos, una chamarra de cuero negra y un pantalón de mezclilla.
Se acercó mas a mí y me hablo.
- ¿Algún problema amigo?
-¿Disculpa?, ¿Amigo?, yo lo único que quiero es morir.
El lobo se veía un poco mas grande que yo, pero eso que importaba.
- ¡Amigo!, No puedes terminar tu vida tan joven.
- ¿Quién eres para meterte en mi vida?
Me estaba comenzando a ponerme de mal humor.
- Nadie... Solo quiero Ayudarte.
¡¡La Pinche frase de nuevo!! "Quiero ayudarte"
Esas palabras ya no tienen efecto ahora...
- Eso ya lo he oído muchas veces.
- Mmm. ¿Alguna otra forma de ayudarte.. .?
- ¿Por qué quieres ayudar a alguien como yo?
Hubo un pequeño silencio cuando le dije eso.
- Me gusta ayudar a las personas.
- Bueno... Pues me puedes ayudar a ¡¡largarte!!
No sé ni porque le grité... Pero enserio tenia mucho enojo, el licor o lo que sea que me haya dado ese señor me hizo efecto al instante.
- Está bien, si eso es lo que te hace feliz me voy... -Dijo Como sino le importara y se levanto de su lugar.
- Espera... -El volteo a verme-, Bueno... No, no es nada.
Él camino hacia mí, solo me toco el hombro con su pata, y me sonrió, diciendo:
No te rindas aún; lo mejor está por venir.
Solo dijo eso y se fue, salió del lugar sin mas, salí corriendo a alcanzarlo, pero cuando vi ya se había ido.
- ¿Será algún fantasma...? ¿Una señal quizás?
Observé mi celular y vi que verán las 2:30pm. Tenía que regresar lo mas rápido posible.Pagué con el señor del bar y me fui inmediatamente de ahí. En el camino, fui pensando en lo que me dijo ese tipo.
Cuando de la nada suena mi celular.
-¿Bueno? Quién habla.
-¡¿Como que quien habla?! ¡Soy Mari!
- Aaah... Perdón, no me fijé, ¿qué paso?
- ¿Ya te encuentras mejor?
-Ya Mari, perdona si fui grosero contigo... Enserio.
-Descuida, decidí mejor darte tu tiempo. Por cierto me enteré que te cambiaras de ciudad, ¿no?
- ¿C-Cómo supiste eso? Además no sé si ya esté confirmado eso.
- Hoy en la mañana fui a verte pero no estabas, así que tu papá me recibió y en eso él me dijo lo del cambio de casa. Tal vez ya lo eché a perder, ¿verdad?
- No, no importa ya entiendo... pues sí dentro de unos días quizas.
- ¡¡Haremos muchas cosas Izu' antes de que te vallas!! Me dijeron que en 8 días se iban.
- Sólo 8 días... Uff, bueno tengo que colgar hablamos en la escuela.
- ¡¡Claro!! Lo que tu quieras Izu, recuerda que estamos nosotros.
- Adiós y gracias por preocuparte.
- Sayonara~~
Entonces solo quedan 8 días, que mal... Bueno me hizo sentir bien que se preocuparan por mí, casi nadie lo hace. (En realidad no lo había notado)
Llegué a mi casa, hice todos mis pendientes, fui a trabajar en la tarde por lo que me agarró la noche, caí rendido en mi cama.
<<< Día 3 - Día 10 >>>
Desperté somnoliento aún y estaba en un lugar completamente diferente, no era mí casa, ni mucho menos mi habitación. Además estaba semi desnudo
-¡¿Qué está pasando?!
Venia alguien hacia mi, solo cerré mis ojos tras el miedo que me invadió. Entonces, el individuo me dijo algo al acercarse.
Te extrañaré... Izuke.
-¿Uh?