Capítulo 8

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Después de que Na Ri se desahogue con Suga, ella se limpió las lágrimas y volvió a trabajar sin darle importancia a sus ojos hinchados y rojos, aún así pudo seguir trabajando. En la noche llevo a sus compañeros a comer y por supuesto a tomar, Suga decidió acompañarla porque sabía la razón y no iba a dejarla sola ya que se notaba que tenía planeado tomar hasta desmayarse, eso hizo Na Ri así que después tuvo que llevarla a casa y durante el camino tenía que ayudarla a vomitar, lo cual fue difícil para alguien que detestaba la suciedad, una persona sensible a los olores.

Habían pasado dos días desde que Jimin se instaló en el departamento, Wonyoung quién vivía a su lado lo ayudaba en todo lo que necesite, incluso daba dinero para cocinar así que los dos departamentos se convirtieron en una sola casa para los dos.

— Y así es como hacer un desayuno fácil de preparar, fácil y ahorrativo. —Decía Wonyoung terminar de preparar Japchae , mientras Jimin apuntaba toda la receta en un cuaderno.— Vamos a comer.

— Pondré la mesa... —Con rapidez lleve los platos y servilletas a la mesa.—

— ¿Todavía no llamaste a Na Ri? ¿Tan fuerte fue la pelea que tuvieron? —Preguntaba por curiosidad, notando como Jimin soltaba un suspiro así que entendió que debía cambiar de tema.— Mañana es nuestro día libre, te invitaré a comer.

— Un caballero deberia-

— Somos de la misma edad, pero me tratas como si fuera una señora, por dios Jimin ¡Trátame casualmente! —Mas que una petición sonó a una orden, lo cual hizo que Jimin riera.— ¿Acaso no puedo invitar a un amigo a comer?

— No es eso, yo quisiera hacerlo pero no tengo el dinero suficiente... Solo por esta vez dejaré que pagues por la comida, otro día yo te llegaré al restaurante más caro de Seúl.

— Ok, es una promesa entonces. —Wonyoung sonrió al empezar a comer, Jimin también hizo lo mismo así que ambos disfrutaron del bello momento.—

Por otro lado, Na Ri fue llevada por Suga a comprar una laptop nueva, él prácticamente la obligó a aceptar el regalo con una tonta excusa sobre el mejor rendimiento de sus trabajadores. Además de la laptop obtuvo una segunda oportunidad para volverse escritora principal, entonces ella no tuvo más que otra opción que invitarlo a comer, aunque era un lugar no tan caro Suga no tuvo problemas con comer en aquel lugar y hasta estuvo sonriendo todo el día.

                                   ∞∞∞

— Llegamos, gracias por traerme hasta mi casa y te juro que daré lo mejor de mí para darte el mejor libreto. —Sonrió Na Ri al buscar sus llaves en el bolso, sintiendo como Suga la tomaba del brazo suavemente.—

— Sobre ese chico que dijiste hace dos días de que lo extrañabas, creo que es una simple ilusión... —Suga dio un suspiro al dar un paso más, acercándose a Na Ri.— ¿Por qué no lo intentamos?

— ¿Intentar, que? —Preguntó al dar unos pasos hacía atrás para marcar distancia, pero Suga volvió a acercarse.—

— Salir, no puedes negar que también sientes interés por mi ¿O me equivoco? Yo siento atracción por ti, así que no perdemos nada con intentarlo. —Sintió como Na Ri deshizo el agarre, bajando la mirada.—

— Bueno sí siento atracción por ti, pero... —Un inesperado beso la hizo callar, después Na Ri se quedó flechas con aquellos ojos negros y fríos.—

— No es amor, porque esa palabra es muy fuerte... Salgamos desde hoy y dejemos que fluya con el tiempo. —Suga sonrió al ver como la escritora tenía las mejillas sonrojadas, entonces ambos se acercaron mutuamente y se besaron.—

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