El misterio del lago.

Capítulo 4. Viernes 13.

Mi familia se mudó al pueblo hace un año y medio, soy el hijo del medio, Faethio es el mayor y Aura es la menor. Al establecernos en el pueblo mi padre se hizo amigo íntimo de la señora Emerald Clawthorne, fue ella quien tuvo la idea de crear la granja de cerdos en unión con nuestras tierras. Tras su desaparición y ver el interés del señor Clawthorne se accedió al acuerdo.

-Joven Amethio, ¿cuál era su relación con los Clawthorne? Lo que nos ha dicho es sobre sus padres. – Dice la fiscal. Miro a Aura y a Faethio entre el público.

Gracias a la cercanía de nuestras familias M.J. y yo nos volvimos muy cercanos. Compartíamos intereses, M.J. es muy apasionado, siempre me comentó su interés por estudiar periodismo, después de la desaparición de la señora Emerald, se enfocó en seguir una pista. Llegó a mi casa una mañana, había encontrado una carta de mi padre hacia su madre. Al parecer, o lo que nos daba a entender su contenido es que tuvieron un momento fugaz. M.J. me suplico que le preguntara si era cierto; así que eso hice.

Esa noche visité a mi padre en su estudio, le mostré la carta, mi padre me contó lo ocurrido con la señora Emerald. Mi padre la conoció de joven, se enamoraron, pero el destino no los quiso juntos, mi padre se fue a estudiar a América y la señora Emerald se quedó en Fields; y conoció al señor Clawthorne. Cuando nos mudamos se reencontraron, al inicio todo era platónico, se esforzaban por ser solo amigos, pero un día no pudieron contenerse más, y cruzaron la línea. De eso trataba la carta.

Salí esa noche a verlo, toqué a su puerta y M.J. salió, fuimos a caminar por el muelle del lago, le conté lo dicho por mi padre y tomamos asiento a una orilla del muelle. Hacía frío y le ofrecí mi abrigo. Le dije que quizá era una maldición en nuestras familias, pregunto a qué me refería. Lo miro en el público. "Así me siento M.J., cuando hablamos, cuando te veo, cuando te siento.", dije tomando su mano. Él me miró, "Creo que siento lo mismo. Amethio, no creo que pueda corresponder." No me importó sus palabras, lo besé. Mi padre me ve con desaprobación desde el público. M.J. se levantó y me dejó allí solo.

Finalizaba la feria del pueblo cuando presenté mi show, canté esa noche, le canté a él. Le expresé todos mis sentimientos en esa canción. Lo vi entre la gente del pueblo, cuando bajé del escenario me esperaba. Esa noche lo acompañé a su casa, hablamos durante horas, me contó sobre la ventana secreta detrás del cuadro, me contó que por ahí se escabullía cuando su padre no lo dejaba salir. Al despedirnos me besó, me confesó que también sentía lo mismo, dijo que esperaba un día poder corresponderme a todo.

De camino a casa pasé por los viñedos cuando vi el auto del señor Clawthorne aparcado, él se encontraba allí con Leti, los vi y seguí mi camino.

-Háblenos sobre el día en que falleció el señor Clawthorne. – Interviene la fiscal.

Desde que M.J. se fue a vivir a Londres llevamos una relación por teléfono, cuando él venía a quedarse con su padre yo me escabullía a verlo por su ventana secreta. M.J. me llamó ese día desde Londres, dijo que vendría al pueblo, me pidió verlo en su casa a las siete. Entré a su casa por la ventana secreta, él me esperaba allí.

-¿Quiere decir qué M.J. Clawthorne se encontraba en Fields el día trece? – Asiento.

Estuvimos juntos hasta las nueve, el señor Clawthorne no se encontraba en casa, y escuchamos su auto llegar, ambos salimos por aquella ventana, y lo acompañé a tomar el autobús a Londres.

-¿Lo vio subir al autobús? – Pregunta la fiscal.

-No. – Respondo.

-¿Cuándo volvió a ver a M.J. después del asesinato? – Continua la fiscal.

A la mañana siguiente de encontrar el cuerpo. Supe que se quedó en la posada de los Bourne. Fui a verle temprano.

-No tengo más preguntas. – Dice la fiscal mientras veo el rostro temeroso de M.J., en ese momento no entendía que sucedía.

-Siguiente testigo. Lazuli Blackwood. – Dice la juez.