El misterio del lago.

Capítulo 15. Feliz día de tu muerte.

Hago mi desayuno esperando con ansias ver a Mirto, mi relación con Leti en algún momento saldrá a luz y más aún con un hijo en camino. Salgo al muellea organizar la canoa cuando lo veo llegar, me saluda amable, gentil. Me ayuda con lo que falta y empezamos nuestro día de pesca, entre la conversación surge el tema Leti, desde la feria se han oído rumores de ella y yo. Hace unas semanas me contó sobre Mirto y que salían para no levantar muchas sospechas.

-¿Has oído los rumores sobre ti y Leti?

Sí, pero son solo rumores, la gente del pueblo es feliz hablando. No puedes creer en todo lo que dicen, la gente me busca pareja desde que Emerald desapareció.

-Sí, creo que tienes razón. – Me responde dudoso.

Terminamos la pesca casi a medio día. Mirto toma una porción y se va. Regreso a casa, me doy una ducha y hago mi almuerzo.

Al llegar la tarde le llamo Leti, pero no contesta. Subo al ático en busca de una de las cajas con las cosas de Emerald, tomo una y salgo de casa, subo al auto y conduzco hasta llegar donde Darren. Él me abre atenta, cordial, le comento sobre el día en que Emerald desapareció.

Emerald salió esa mañana, regresó en la tarde para decirme que nuestra relación no estaba funcionando, por qué... ya sabes. Supongo que cuando salió fue a buscarte.

-Si, vino a decirme que si solucionaba algo nos escaparíamos y quedamos en vernos en la cabaña en el bosque.

Estuvo con Lazuli casi hasta las cinco donde te llamo. Luego no se sabe de ella, solo hasta que él testigo la ubica a las diez en la cafetería donde habló con una mujer, de ahí ya no sabemos más.

-Yo la esperé en la cabaña hasta la medianoche y regresé a casa.

¿A qué hora llegaste?

-Casi a las nueve.

El informe policial dice que el testigo la ubicó a las diez. Tuvo que haberle pasado algo cuando salió de la cafetería

-¿Quieres ir a preguntar?

Ambos nos dirigimos a la cafetería Daltone a las seis con treinta, Gregory Daltone nos atiende y de inmediato le pregunto por lo ocurrido ese día, él se pone un poco nervioso y al final habla.

-Su esposa llegó con la señora Blackwood, yo las atendí, pidieron un café y mientras conversaban alcancé a oír que esperaban a un sujeto. Él llegó y les entregó un paquete, luego se despidieron y la señora Blackwood se fue en su coche, su esposa esperó unos minutos y luego se fue por la avenida Christie.

Regresamos a casa en silencio, llegamos y la casa huele a té, quizá Leti vino en un momento y lo dejó listo mientras no estuve. Le ofrezco un poco de té a Darren, pero hace una negación.

-Creo que lo mejor es hablar con Lazuli, quizá nos pueda decir quién es el hombre que estuvo con quién estuvo.

Me sirvo el té y mientras lo bebo pienso en Leti, ¿puedes ir a preguntarle? Creo que necesito pensar en lo que debo hacer, en unos meses mi vida cambiará y debo estar seguro de si seguir con esto. Termino mi té.

-¿Cómo? ¿Es por Leti?

Asiento. Si, creo que has oído los rumores. Habla con Lazuli y mañana conversamos Darren. Él Asiente y se va.

Unos segundos escucho unos fuertes golpeteos, abro la puerta rápidamente. Mirto entra a mi casa de inmediato, lo detengo tomándolo del brazo.

- ¡Mirto! ¿Qué sucede contigo? – Pregunto confundido. Se suelta brusco y me golpea el rostro.

- ¡Mirto, por favor cálmate! – Lo tomo fuerte de los brazos haciendo que tome asiento. Saca una carta de su bolsillo del pantalón tirándola a mis pies. La recojo confundido y la leo. – Te acuestas con ella, ¿sabías que la quería? ¿Sabes... yo también me acuesto con ella? – Dice desconcertado. Dejo la carta sobre la mesa, camino hasta la cocina y sirvo un poco de té; le ofrezco una taza y acepta.

Tomo asiento y comenzamos a conversar mientras tomamos el té, le comento como empezó todo con Leti cuando siento mis parpados pesados, escucho su voz volverse tenue. Trato de llevar mi taza de té a la mesa, pero se me cae al no poder sostenerla, lo veo algo borroso, y caigo de mi asiento al suelo.

***

Fuera de la casa de los Clawthorne, Egberto Wessex coloca la cámara que graba la casa y el muelle, camina hasta su auto y sube al puesto del copiloto.