Había llegado al parque junto a Andy, la brisa fresca y el movimiento de las hojas en los árboles era espectacular. Después de caminar por un largo sendero lleno de sombra por los árboles finalmente allí estaban mis amigos. Algo sorprendidos por verme llegar con un chico al que no conocían. Hacia mucho tiempo que no abrazaba a mi mejor amiga Elodie. Bueno, realmente no es muy cariñosa del todo, poder abrazarla es un total privilegio. Luego seguía mi amigo Diego, también poco cariñoso pero lleno de un gran sentido del humor.
—Los he extrañado muchísimo—dije mientras nos abrazábamos de forma grupal.
—Quiero presentarles a alguien.Andy se apegó más de lo normal a mi lado, en ese momento comenzaba a sentirme nervioso, no me gustaba que sucediera eso aunque en el fondo si.
—Él es Andy, mi mejor amigo «o mi futuro novio» quizás no lo conozcan muy bien del todo pero apuesto a que si les caerá súper bien.
Elodie y Diego saludaron a Andy y yo me sentía tranquilo. Caminábamos en grupo hasta una zona mucho más tranquila del parque. Mientras miraba hacia arriba pudiendo percibir los rascacielos que rodeaban aquel parque, Andy se separó de mí raramente.
—A donde vas—pregunté
Elodie y Diego —ambos iban frente a nosotros—voltearon a vernos.
El volvía hacia donde yo estaba con las manos atrás, escondiendo algo. Se me hacía extraño «un anillo de promesa tal vez» no hace eso muy seguido y si lo hace es simplemente escondiendo algo que me pertenezca.
—Levanta tus manos, ábrelas y cierra tus ojos. Lo hice dudando un poco.
Andy me había hecho un pequeño ramo de las flores que encontró en el parque. Era muy bonito. Y mucho más bonito la persona que me las había hecho. Sus ojos enchinados por aquella sonrisa no tenían precio.
—Te gustan?—preguntó
—Me encanta—respondí con un abrazo exagerado.Podía ver la cara sorprendida de Elodie cuando lo abrazaba. Me hizo señas de un corazón con los dedos. Hice lo mismo con un "no" de respuesta. Internamente era un si. Si bien, llevo casi dos años hablando con Andy; no hablaba mucho de él con Elodie, aveces siento miedo de que sienta celos de él o intente hacer algo malo. Aunque es mi mejor amiga y se que es malo juzgar así de alguien mucho más cuando se trata de alguien cercano, ella es algo dominante en ese sentido.
Nos sentamos en una manta que Diego había llevado. Podíamos ver un estanque un poco mas al frente de nosotros y varios árboles aún estando debajo de uno. Me senté y mientras hablaba un poco con Elodie sentí algo muy pesado sobre mi regazo. Andy se había acostado en mi regazo. Lo miré fijamente a los ojos y pude sentir muchas mariposas en mi estómago, no podía procesar lo que ocurría en ese momento.
Diego molestaba a Elodie recordándole sus amores del pasado mientras que pude ver un carrito de helados llegando a donde estábamos; grité. Mi mejor amiga y yo queríamos uno, forzando a que los dos hombres de aquella "cita" fueran por ellos. Diego y Andy fueron a por los helados que Elodie y yo habíamos pedido. Podía ver a la distancia como me miraba y sonreía aun estando pidiendo los helados. Elodie se acercaba a mí tal parece quería dialogar conmigo.
—Quiero preguntarte algo Kai—dijo
He estado notando algo muy raro entre ustedes dos. No soy tonta, sé que algo se traman ustedes. Andy me parece un chico de buen corazón, es apuesto y súper dulce. Pero pienso que ustedes llevan algo en el fondo— Respondí con un "no" moviendo la cabeza.Los cuatro reíamos y hablábamos de nuestras desgracias o momentos graciosos de la vida. Andy reía muchísimo en especial con Diego, era un chico de muy buen humor y siempre se sale con la suya incluyendo aquellos chistes de doble sentido que nunca fallan en una amistad. Elodie andaba algo sería aunque si se reía un poco podía notar su seriedad algo incomoda, en especial para mí. Yo intentaba ignorar eso de ella distrayéndome con los chistes de Diego «y la risa de mi chico» digo, debo decir la risa de Andy.
—La noche nos llegó muy pronto, no quisiera irme pero tengo que hacerlo—dijo Diego mientras hacía expresiones de tristeza para añadir algo de dramatismo al momento.
—Yo necesito irme ahora, la estación de metro cierra pronto y no quiero llegar tarde a casa—dijo Elodie mientras se levantaba de la manta y recogía su cartera.
Todos nos despedimos de aquel día tan divertido y genial que tuvimos. Andy y yo caminábamos por aquel parque silencioso, totalmente tranquilos. Hasta que pude sentir un cálido brazo entrelazándose con el mío. Andy se recostaba en mi hombro mientras caminábamos hacia su auto. Era tierno eso.
—No quiero que esto se acabe—decía
—Yo tampoco. Fue un día genial cierto?
—Si, no me había divertido así en muchísimo tiempo y tus amigos me cayeron súper bien.Me sentí calmado y feliz por eso. Sabía que eso iba a suceder. Al llegar a su auto finalmente pude comprobar que algo estaba sucediendo de manera muy extraña.
—Bien, retomemos lo que empezamos.
—¿A que te refieres?—pregunté
—Taylor Swift, por ti la escucharía la mayor parte del tiempo.
—¿Estás seguro de eso?
—Así como lo escuchas—colocó su mano en mi muslo.Tomé su celular y empecé a buscar una canción en el playlist apresuradamente, sentía nervios y no quería que algo vergonzoso sucediera «una erección» «manos sudorosas» quien sabe que otras cosas pudieran suceder en situaciones como esa. Coloqué una de mis favoritas que de igual forma iba acorde a aquella noche en aquel auto con la persona que, bueno «amaba en secreto» y que de esa forma es como puede obtener mi amor.
Me perdí en aquellos momentos tan bonitos que tuve con él en esta "cita", fueron poquitos pero los disfruté muchísimo aunque me daría mucho de que pensar antes de dormir, sobre todo aquel arreglo de flores tan repentino que hizo y cuando entrelazó su brazo con el mío. Fue especial, pero más espectacular y especial es querer saber lo que realmente este chico esté sintiendo.
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Midnight Rain
Ficção AdolescenteSoy Kai, me gusta leer, escuchar a Taylor Swift y sobre todo la fotografía. Hace cuatro meses, antes de vivir todos mis días encerrado en una habitación, tener que socializar por obligación y dudar de mi sexualidad, tenía un mejor amigo. Mi vida era...