🎧: Stay with Me — Sam Smith
(Kai)
—Estoy emocionado, la verdad llevaba mucho tiempo esperando que lanzara su nuevo álbum. Decía yo mientras chateaba con Andy.
—Suena bien. —contestó.
—¿Que te parece si lo escuchamos juntos?
—No lo sé, es que...no creo.
—Bueno, pensé que dirías que sí, Adele es una de tus artistas favoritas.Comencé a sentirme incómodo en esta conversación, algo comenzaba a suceder en Andy lo cual me extrañaba.
—Esta bien podemos hacer otro plan. Que tal si vamos al cine. Hace mucho no salimos juntos, la verdad extraño nuestras citas.
—Tienes razón, pero es que últimamente no he tenido tiempo, tampoco he podido conseguir ahorrar dinero.
—No te preocupes, yo puedo pagarte el boleto.
—No Kai, no tienes porque hacerlo.
—Vamos, haría lo que fuera por verte.Mi cabeza hacía rompecabezas, meditaba si había hecho algo erróneo que pudiera haber desatado ese comportamiento distante de Andy. Era raro pero a la vez incómodo.
—Tengo que dormir, descansa. —respondió.
Decidí reservarme las buenas noches. Era molesto su comportamiento. Sentía como mi cuerpo comenzaba a calentarse, mi corazón latía aceleradamente. Mis manos estaban en mis mejillas recibiendo aquel calor que se desprendía de ellas. Sentía como el calor que recorría mi cuerpo iba cargado de ansiedad, de pensamientos que nublaban cualquier emoción positiva en mi mente.
Con mi habitación tenue, tanteaba sobre la mesa de noche buscando encender aquel humidificador con mi aceite esencial de lavanda. Hacía que pudiera sobre llevar la situación. Pero aun así, me hería ese tipo de acción.
—Leah, puedo hablar contigo sobre algo personal. —expresé mientras sostenía mi móvil en mi hombro en una llamada. Preparándome un té de camomila para sobrellevar aquel acontecimiento.
—Trata sobre Andy, ¿no? —respondió.
—Si, pero es más complicado. Su comportamiento es diferente, impone excusas para evitar vernos, hace varias semanas no logro verlo. Me rechazaba las videollamadas, solo chateamos. No paro de pensar en esa actitud.—Entiendo perfectamente tu situación. Me parece extraño que venga de Andy, al conocerlo me pareció un chico súper dulce y bastante atento a ti. Tal vez tenga una mala racha. ¿Has intentado preguntarle si realmente se encuentra bien?
—Leah, he intentado pero cambia de tema. No me deja ayudar en sus problemas.
—Kai, no quiero sonar pesimista pero, deberías tomarte un descanso y el de igual forma. No quiero malinterpretar la situación pero quizás necesitan tiempo para saber cómo manejar su futuro como amigos o tal vez como pareja.
—Realmente, ¿crees que sea eso?
—Kai, se han saltado muchas etapas.Mis mejillas se empapaban en lágrimas, lloraba en silencio en aquella cocina la cual solo se iluminaba tenuemente con aquella vieja lámpara. No respondía, escuchaba como Leah me llamaba múltiples veces en la llamada. Quería hacer que eso cambiara, no quería tomarme un tiempo.
—Es que no quiero, no puedo—respondí con mi voz quebrantada mientras persistía el río de lágrimas.
—Se que es difícil Kai, pero debes ser consciente que si no lo haces será perjudicial en un futuro. Piensa en ti, reflexiona que cosas debes mejorar antes de relacionarte con ese chico. Tienes la oportunidad de reconocer tus debilidades y fortalecerlas antes de que algo suceda.
—Me cuesta mucho...si lo hago, me sentiré incompleto, el significa mucho para mí. No quisiera apartarme de él de la noche a la mañana.
—Hazlo Kai, vuelve cuando sientas que sea necesario o cuando ambos estén bien.Terminé la llamada, al llegar a mi habitación agarré mi cuadro de fotos con Andy, mientras empapaba mi pijama de pequeñas gotas de dolor. Sabía que sería lo correcto tomarme algunos días para pensar realmente lo que debería hacer.
Andy lo es todo para mí, me duele que sea así conmigo cuando se que merezco una buena razón para saber su comportamiento. Me duele que tengamos que dejar nuestros sentimientos en espera, cuando ambos no vemos que hay un corazón de por medio que sufre dolorosamente. Cuando a pesar de la adversidad ese corazón grita quédate conmigo...
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Midnight Rain
Teen FictionSoy Kai, me gusta leer, escuchar a Taylor Swift y sobre todo la fotografía. Hace cuatro meses, antes de vivir todos mis días encerrado en una habitación, tener que socializar por obligación y dudar de mi sexualidad, tenía un mejor amigo. Mi vida era...