Victoria y yo pensamos ponernos nuestros vestidos nuevos para la ocasión. Tras declararle mi amor, cenamos y dormimos en mi casa. No tocamos el tema, solo dijimos de aclarar las cosas más adelante, por lo menos, después de la fiesta de Damiano. Cuando volvimos a casa, vimos que había mandado un mensaje diciendo que mañana habría fiesta. En un local y que fuéramos para la ocasión. Era algo mucho más informal, pero pues cada quién se viste con lo que quiere.
Era al mediodía y Victoria y yo nos dedicábamos a envolver los regalos de Dam.
-Alda tía, yo no sirvo para esto.- Sopló y volvió a desdoblar el papel de regalo.
-Yo te ayudo anda.- Cogí la caja que contenía dentro la taza, el papel y la cinta adhesiva.
Terminé por envolver yo todos los regalos, mientras Vic me hablaba de temas al azar. Cuando terminé tuvimos el debate de la comida.
-Podemos pedir algo a domicilio, sushi, o pizza.- me dedicó una de sus expertas miradas de cachorro abandonado.
-Pide lo que quieras, yo pago.- Suspiré, pasaba de ponerme a cocinar.
-Pago yo, no te preocupes.- Dijo sin despegar la mirada de su móvil.
-A medias.- Regateé. Me guiñó un ojo y tecleó algo en el móvil.
-Voy a pedir chino. ¿Lo de siempre?- Enarcó una ceja.
-Sí, claro, lo que sea.
Se fue del salón, supongo que para hacer la llamada al chino y yo me quedé sola allí. En una media hora llegó la comida, y comimos super bien, obviamente. Después nos pusimos una peli para matar el tiempo y al terminarla ya era la hora suficiente para empezar a vestirnos.
-¿Podré maquillarte yo?- Me preguntó y de un tirón arrancó la etiqueta de su vestido, yo hice lo mismo.- Es que yo no tengo pensado hacerlo y me apetece maquillar a alguien.
-La verdad es que yo tampoco tenía en mente maquillarme, pero te dejo hacerme algo sencillo.- Me quité la camiseta y los pantalones de pijama, para después comenzar a ponerme el vestido.- ¿Me lo abrochas?
Victoria, quien tenía el vestido a medio poner se acercó a mi, yo le di la espalda para que me abrochara el vestido desde atrás, ya que la cremallera estaba en la espalda.
-¿Me lo abrochas tú?
Le cerré el vestido y nos terminamos de preparar. Vic me hizo un eyeliner y unas ligeras sobras de ojos del mismo color que mi vestido.
Me miré al espejo del pasillo, me veía muy guapa.
-Estamos guapísimas.- Aseguró Vic mirándonos desde mi lado en el espejo.
-Sí, lo estamos. ¿Vamos ya?- Ambas giramos a la vez nuestros cuerpos quedando cara a cara. Su rostro se acercó a penas unos centímetros al mío, pero fue lo suficiente para estar tan cerca que sentía su respiración.
-Bueno, aún quedan un par de minutos antes de que tengamos que salir... podemos aprovecharlos.- Pasé mi mano por su cuello, atrayendola hacia mi. Al momento, uní mis labios a los suyos, besandola intensamente.
Tras unos intensos minutos así, intenté apartarme de ella, pero Vic no dejaba de besarme.
-Vic, tenemos que...- Fui interrumpida por otro beso suyo.- Nos tenemos que ir.- me separé por fin del todo. Si por mi fuera, seguiría horas ahí con Vic, pero era el cumpleaños de Dam y no quería llegar tarde.
-Joder Alda, no pasaba nada si llegabamos un poco tarde.- Bufó.
-Ya claro, lo dices tú que llegas tarde a todo, ya te da igual, pero a mi no... Así que vamos ya.
ESTÁS LEYENDO
Maneskin 3
FanfictionEn esta tercera parte Alda tratará de adaptarse a los nuevos hechos presentes en su vida. Aprenderá a amarse, a adaptarse, a descubrir y aprender de las cosas negativas.