Servitude

seis

—Así que estás embarazado.

De tan sólo reconocer la voz de Kia se hizo un ovillo en aquella esquina, sintió cómo era tomado de los brazos y gritó de terror.

—Hace una semana te dije que comenzaras a lavar y sólo has estado aquí como una mierda.

—L-Lo siento mucho.—se disculpó sintiendo como le obligaba a ponerse de pie.—¡Me duele! ¡No! ¡Me duele!

—¡Quédate de pie!

Jeongin se recargó de la pared y al mirar hacia abajo quiso gritar al ver la sangre aún bajar por sus piernitas delgadas.

Se sentía morir.

—Me duele.

—A partir de ahora hay nuevas reglas.

—Me duele, de verdad me duele, ¿no me está escuchando? Por favor escúcheme... me duele estar d-de pie... escúcheme, por favor.

Cayó al suelo al recibir un fuerte impacto en el rostro.

—Quien habla aquí soy yo, calla y obedece. Calla y obedece, recuérdalo.

—S-Sí señora.—contestó bajando la mirada al suelo manchado de su propia sangre.

—A partir de ahora vas a obedecerme sólo a mí. Yo diré si te levantas, si duermes, si comes, si mueres o vives. ¿Estás entendiendo?

—Sí, señora.—respondió a lo bajo sintiendo sus entrañas destrozadas.

—Cada que baje quiero todo limpio, tengo muchos castigos para ti si no cumples con eso.

Jeongin miró de reojo a la mayor la cual tenía en manos un cinturón de cuero, sabía lo que significaba y daría todo de sí para que no le golpeara.

—Arriba.—lo tomó de los brazos y le llevó al baño donde le despojó la ropa y tiró agua fría sobre su cuerpo.—Vístete.

—P-Pero me duele levantarme... por favor señora... me duele, ¿cómo voy a trabajar?

Kia le vistió ignorando totalmente sus palabras, lo llevó a su esquina dejándole caer al suelo sin cuidado.

—¿Me escucha? E-Estoy hablándole...—extendió su mano hacia la beta la cual le miraba sin expresión.—S-Señora... ¡por favor no se vaya! ¡No me deje aquí!

Hoy cumplía cuatro semanas de embarazo y aquello fue confirmado cuando la pequeña prueba de embarazo dió positivo y también dió el tiempo que tenía.

Cuatro semanas, es decir un mes, un mes encerrado bajo tierra.

Estaba tan devastado.

Estaba tan destrozado.