Servitude

diecisiete

—¡Por que tienes que ser un alfa tan idiota!

—¡No pude contenerme! ¡Seguro se lastimó su pancita!—lloriqueó señalando la puerta de la habitación.—¡Y su estúpido alfa me corrió de ahí!

—Hyunjin mejor cierra la boca, cada que la abres más mierda sale de tu boca.

—Bokkie no me digas eso... de verdad estoy preocupado. ¿Por qué temía que su bebé llorara? Dijo que se enojaría si lo escuchaba, ¿el doctor Lee es así de malo?

—Estás delirando, el doctor Lee es un amor con su omega. ¡Los vi darse amor en el pasillo! Algún día tendré a alguien que me ame como el doctor Lee ama a su durazno.—Felix sonrió fantaseando.—Imagínate que lindos son, le dice duraznito por su aroma.

—¿Durazno? Ese omega no huele a durazno...

—Estás delirando, Jisung huele a durazno y se nota en el aroma de su alfa.

—Pero... e-el omega del bebé no tiene ese aroma, ¿tiene dos omegas?

—¡¿Qué estás diciendo?! El doctor Lee tiene un sólo omega, su predestinado. ¿Acaso no los ves? ¿Qué te picó ahora? Soy yo el enfermo pero tu eres el que se ve jodido.—rió al ver el rostro pálido del alfa.

—Entonces... ¿s-sólo lo usan para que les den bebés?—murmuró recordando ese rostro asustado y de como el doctor Lee le abrazaba tan posesivo.

—¿Hyunjinnie? ¿Seguro que no estás enfermo? ¿Qué dijiste?

—¡Debo sacarlo de aquí!—soltó de la nada cuando otra teoría salió de su mente.

—¡Hyunjin por dios ya cálmate! ¿Qué carajo dices?

—Es que... el otro omega, el que asusté... también es omega del doctor Lee y s-sus bebés... él...—se cubrió la boca haciendo drama por asumir algo incorrecto tan pronto.

—Hyunjin.—jaló de la oreja al alfa hasta hacerle caer a la cama.—Despierta ya imbécil, ¿qué estás diciendo?

—¡Aish! ¡Mi oreja! ¡Felix mi oreja!

—¡No voy a soltarte hasta que dejes de decir esas estupideces! ¡El señor Lee es un buen alfa!

—¡Eso no es cierto! ¡Utiliza a ese pequeño para que le de bebés!

—¡¿Qué estás diciendo?! ¡Ese omega es un paciente! ¡No es omega del doctor Lee porque el ya tiene uno! ¡¿De dónde sacaste esa estupidez?!

—¡Es que estaba tan asustado! ¡Tenía miedo y el siempre está ahí para protegerlo!

Felix le soltó de golpe contra la cama.

—Eres un idiota, no puedes llegar de la nada a la vida de ese pequeño, no sabemos por lo qué pasó y por la razón que está internado aquí. Entiende que el doctor Lee no es su alfa y que no puedes acercarte.

—¿Por qué no puedo?

—¡Porque lo asustas! ¡Entiéndelo!

—Pero ¿por qué? Sólo intenté arrullar a su bebé porque estaba llorando... y... entonces ese alfa apareció de nuevo.

—Sí, de plano eres estúpido.—soltó un golpe contra la cabeza del alfa.—No puedes arrullar a su bebé si te tiene miedo. Debería lincharte desde ahora, eres tan estúpido y bruto. No puedes ni siquiera respirar el mismo aire que su bebé.

—¿Y por qué no puedo? Es sólo arrullarlo y ya, soy muy bueno cuidando de bebés y lo sabes, cuido muy bien de Jake, el hijo de Minnie y Channie.