No Conoces La Maldad || HYUNMIN||

09+

Seungmin dormía plácidamente, un poco inquieto con su sueño pero nada que no pueda controlar.

La puerta se abrió en un estruendo sacándolo de su más profundo estado. Escuchaba la voz distorsionada en el living y se levantó a mirar que ocurría no sin antes buscar algún arma.

-... está ahí, se silencioso.

La voz de Changbin lo hizo pensar que hablaba con un desconocido.

Tiró del seguro para atrás y abrió la puerta apuntando a quien sea el intruso.

Suspiró al verlo

- Que bonita sorpresa - susurró Hyunjin acercándose - estaba asustado sin saber que ocurrió.

El menor suspiró con alivio al verlo y le entregó el arma a Seo, se acercó para darle un beso.

- Amor - susurró en sus labios - no debiste venir, es peligroso, fue imprudente, lo sabes no? - el menor cerró los ojos acercando nuevamente sus labios a los contrarios dejando cortos besos mientras lo guiaba a la habitación donde anteriormente dormía.

- No importa, llamaste alterado diciendole a Chan que nos vayamos, estaba asustado por ti que pasaba si te encontraban o...si te hacían algo - Hyunjin lo levantó por la cadera haciendo que enrolle sus piernas en su cintura - te necesito junto a mí, necesito saber en todo momento que estás bien.

Pasaron a una seción de besos más húmedos, Hyunjin lo acorraló en la pared y bajo sus labios a su cuello. Deslizó sus manos por las piernas del menor que se aferraban a él y bajó lentamente el pantalón que usaba.

- Oh hyung~, sabes que no mereces esta vida - alejó un poco sus hombros para hablar - y por eso me preocupo por ti.

Hyunjin asintió y bajo al menor lo llevó a la cama y lo sentó en sus piernas.

- Pero te amo y estoy dispuesto a todo por ti - lo sujetó del mentón y con suavidad se acercaron - una noche como está fue la primera de muchas - olvidemos por hoy que somos adultos y revivamos nuestra adolescencia.

Seungmin suspiró con alivio y se dejó llevar, unieron sus labios con lentitud, movimientos calmados que quemaban sus bocas por pasar a algo más, una pareja tan activa como ellos no podían quedarse tan quietos con besos suaves.

El castaño empezó a mover sus caderas sobre el regazo del rubio, movimientos suaves incentivando a tocarlo, Hyunjin lo conocía tan bien que supo lo que quería, llevó sus manos a sus glúteos y lo empujó hacia él, guiándolo con los movimientos que se volvieron más rudos.

Gimieron cuando sus erecciones se tocaron, ahora moviendo en círculos su cadera intentando enterrarse en aquel bulto que sobresalía del pantalón del mayor.

- Mgh~ deja de moverte tan bien me correré a este paso - Hyunjin detuvo sus movimientos sentándolo de golpe en su erección haciendo al menor perder la cordura al tocar ese exquisito miembro.

Seungmin sacó su propia ropa y la botó en el piso, empezó a desabrochar la camisa de Hyunjin y se la sacó, mordiéndose el labio cuando el cuerpo del mayor brilló en esa luz amarilla de la habitación.

De forma coqueta acarició sus hombros y sus brazos, apretando esos pectorales grandes y firmes que tenía, las venas marcadas en los brazos de Hyunjin fueron recorridas por el índice de Kim, la forma en la que el cuerpo del mayor reaccionaba ante él era excitante, su cuerpo brillaba por la fina capa de sudor, sus venas eran inyectadas de dopamina, sus grandes músculos resaltaban para que el menor pueda tocarlos y su miembro se alzaba para hacer presente el inminente deseo.

- Vas a hacerlo tu precioso - y no contemos con su voz áspera y gruesa, lo hacía sentir completamente sumiso, se sentía desfallecer ante él, la piel se le erizaba cuando ese hombre alto y atractivo lo trataba con firmeza.

Seungmin se levantó de sus piernas y fue en busca de lubricante mientras que el rubio quitaba su pantalón y bóxer, esperaba sentado contra el respaldar de la cama con la cabeza recostada sobre el borde de la madera. Miró los movimientos de su novio al pasearse desnudo por el cuarto hasta encontrar un pequeño frasco con un líquido transparente.

Subió de forma lenta a la cama gateando a su lado, se levantó en sus rodillas y abrió el lubricante dejando caer el líquido frío en el miembro de Hyunjin, este arqueó su espalda ante el cambio de temperatura.

- Mierda ahg~ eres magnífico - halagó el mayor cuando las manos de Seungmin empezaron a esparcir el líquido por su miembro, primero de forma lenta acariciando su glande para luego empezar a masturbarlo, subiendo y bajando su mano de forma lenta, apretando sus testículos para hacerlo gruñir, sus dedos delinearon las venas que nacían en la ingle y se perdían en la punta de su pene haciendo que una pequeña gota de semen salga.

Lo miró con diversión y tomo aquella gota llevándose la a la boca y de forma morbosa chupar su dedo hasta dejarlo lleno de saliva.

Hyunjin amó esa acción que lo tomo del brazo y lo hizo bajar, dejando su rostro a un par de centímetros de su miembro.

Solo hizo falta que se lleve la glande a la boca para que Hwang niegue con su cabeza y suelte algunos gruñidos, eran gemidos roncos que solo hacían que el cuerpo del castaño se estimule más, tomó esa pequeña parte del miembro de Hyunjin y chupó como su fuera algún dulce, sus labios y su lengua jugaban con la cordura del mayor quien tomó los cabellos lisos del menor para no dejarlo escapar, su boca estaba haciendo que su mente haga corto circuito y su cuerpo tiemble ante ello.

-Ahg~ malditamente bueno ahg~ - gimió cuando una mano tocó sus testículos apretándolo hasta hacerlo cerrar los ojos.

Seungmin gimió en necesidad, esos sonidos tan eróticos lo estaban volviendo un desastre.

- H-hyung ahg~ por f-favor - habló cuando el miembro salió de su boca y una cantidad muy considerada de semen salpicó a su rostro en especial su boca que se llenó de aquel espeso líquido, sus caderas se movían de adentro hacia atrás inconsciente simulando que lo embestian y Hyunjin no podía apreciar más la vista, esa pequeña cintura se alzaba en un bonito trasero que se movía en el aire buscando atención...

- Ven te haré el amor nene...