Capítulo 133

626 80 338
                                    

Yukhei frunció su ceño cuando llamó a Jungwoo y este en lugar de atender su llamada le envió un mensaje diciendo que estaría ocupado y le hablaría más tarde. Yukhei miró aquel texto una y otra vez con extrañeza, considerando viajar a Daegu porque tal vez su prometido estaba enfermo. Ingresó a su apartamento y agarró la llave de la camioneta porque sería más cómodo viajar en ella en lugar de su deportivo, pensando que, si en tres horas estaba allí, lograría llegar antes de las once de la noche, asintiendo con seriedad a ese plan para finalmente intentar salir nuevamente, deteniéndose al recordar que no podía dejar a Suni sola, por lo que tendría que llevarla con él.

—¿Suni? —llamó al no verla esperándolo en la sala, buscándola en el cuarto de Theo sin tener éxito—. Jae dijo que estaría aquí y no en el apartamento de Jungwoo —murmuró—. Oh, por Dios, que no esté en mi cama —jadeó, porque si era así, tendría que cambiar las sábanas o inyectarse más para controlar su alergia, suplicándole a esa pequeña gatita por no estar durmiendo allí mientras subía las escaleras, frenando en seco al caer en cuenta de que la puerta de su cuarto estaba cerrada.

Se preguntó dónde estaría esa gata escurridiza, terminando de subir las escaleras para abrir de igual manera la puerta porque lo mejor era empacar un par de prendas, quedándose estático cuando observó que su habitación estaba decorada con luces y flores, además de que el ventanal estaba completamente abierto para enseñarle la terraza igualmente decorada y una mesa en medio en donde Jungwoo le esperaba con unos cuantos acompañantes y un par de copas de vino recién servidas.

Yukhei sonrió en medio de una exhalación, sintiéndose contagiado de una gran emoción porque Jungwoo también sonreía ampliamente al verlo, levantándose de su asiento para acercarse, darle un fuerte abrazo y un beso que cortaron por obligación.

—Te extrañé demasiado —confesó Jungwoo con un leve puchero en los labios.

—Y yo a ti, tienes prohibido alejarte de mí más de una vez al mes —se quejó—. Incluso una vez al mes es demasiado —exageró, haciendo que su prometido soltara una carcajada.

—Tú fuiste quien me dejó primero —bufó.

—Lo hice porque tú me obligaste —objetó—. En fin, no quiero tenerte lejos, me siento incompleto sin ti.

—Está bien, Xuxi —respondió, tomándolo de la mano para hacerlo sentar en frente de la mesa a la vez que le enseñaba su alegría por tenerlo allí observando impresionado cada espacio que él se esforzó por hacer ver bien.

—¿Hiciste todo esto solo? —preguntó y Jungwoo asintió—. ¿A qué hora llegaste de Daegu? Debes estar cansado —comentó preocupado.

—Llegué a las tres, pero ya tenía todo en mente e incluso le pedí el favor a Jaemin de recibir lo que compré sin que te enteraras —explicó—. ¿Te gusta? —inquirió ilusionado.

—Por supuesto, mi vida —respondió—. Creo... que nunca alguien... —se detuvo avergonzado— gracias, Junu.

El mencionado le miró acongojado, entendiendo a la perfección lo que quería decirle y teniendo en mente que esa no sería la única vez que le sorprendería de esa manera, porque moría por ver ese rostro iluminado por la felicidad, así que se puso de pie y le besó muy despacio, prometiéndole más días similares y percibiendo su corazón acelerarse cuando Yukhei le dijo que esperaría ansioso por cada uno de ellos.

—Por favor espera aquí, traeré la cena —pidió y Yukhei intentó ponerse de pie.

—Te ayudaré.

—Quédate ahí sentado —se negó de inmediato, obligándolo a reacomodarse en la silla para apresurarse y subir los platos fuertes debido a que ya tenía listos los acompañantes.

Birds [LuWoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora