🌼6.- Carretera y radio. 🌼

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Pensé que me iba a aburrir cenando con ellas, pero la verdad es que me la estoy pasando bastante bien

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Pensé que me iba a aburrir cenando con ellas, pero la verdad es que me la estoy pasando bastante bien. Sus vidas van bien, sus esposos las quieren, ellas a ellos, y a veces no se soportan y discuten, lo típico... creo, nunca he estado casada y tampoco conozco a mucha gente que lo esté que sea muy honesta al respecto. Mi madre es feliz en su matrimonio, mis hermanos también (creo) y Felicity actúa como si también lo estuviera. 

—Amo estas noches de chicas, son lo mejor—chilla Zoey alzando su copa de vino—Por las amigas y las nuevas amigas—me mira y sonríe, todas chocamos las copas y el sonido del cristal me hipnotiza. Estoy borracha.

—Estas escapadas de la realidad son cruciales—me avisa Kendall, que bebe jugo y se acaricia el vientre—Amamos nuestra vida, pero ya sabes, todo el mundo necesita esto. No preocuparse de que tu hija esté haciendo un berrinche.

—O que tu esposo se queje porque la relación ya no es como antes—murmura Jane.

—Cosas de la vida—se ríe Zoey—¿Y tú de qué necesitas distraerte, Aggie?

Lo pienso y suspiro.

—De todo.

Todas se ríen y yo también, como si fuera gracioso que nada tuviera sentido. 

Nada lo tiene, ellas eran populares en la preparatoria; hermosas, delgadas, con novios increíbles. Yo era rara, estaba en el grupo de debate y sólo me empezaron a notar cuando vieron que Brendan y Archie eran mis hermanos y Nathaniel mi mejor amigo y de pronto Jake notó que me habían crecido los pechos y Nathaniel empezó a salir conmigo y... bueno, Nathaniel jugaba en el equipo de futbol americano y ellas me empezaron a tratar bien pero yo siempre fui muy hermética y estuve con Olive.

Durante toda la noche hablan de sus maridos y a veces hablan de sexo y que tan buenos o no son en la cama y yo las escucho como si viera un capítulo de "Big Little Lies", sólo que sin los golpes y... bueno, ya saben. Jane me enseña el catálogo de vibradores que vende por diversión y hacerse la liberal y me dice que ha intentado venderle uno a mi madre pero que mi mamá le dijo que está muy complacida en ese aspecto, yo chillo de asco al imaginarla con mi padre y ellas se mueren de risa y me dicen que de hecho soy suertuda porque sus padres están divorciados o se odian. Yo creo que es peor que se adoren, como mis padres, porque así sabes que el amor verdadero y duradero existe y nadie te ama a ti de esa forma. Es desolador que sepas que sí que hay hombres buenos, fieles y que adoran a sus esposas porque eso significa que eres tú la que no ha tenido suerte con eso.

Después hablan de otras cosas y yo lo agradezco infinitamente. 

Regreso a casa al día siguiente con una resaca gigante haciendo que mi cerebro palpite contra mi cráneo y ver cualquier cosa medio sucia me provoca arcadas. Mi espalda me duele también, dormí en el sofá de la casa de Jane, quien me despertó para darme el desayuno, pero sus hijos estaban ahí, gritando y lanzando comida, y su esposo también, quien me miró y se rio ligeramente, así que huí de ahí y ahora estoy caminando por el pueblo hacia mi casa mientras la gente me mira y se ríe. 

EL FATÍDICO AÑO EN EL QUE ME ENAMORÉ DE UN SACERDOTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora